Asturias es la "joya de la corona" de la siderúrgica y las relaciones entre Gobierno y empresa responden a una "cultura industrial europea" OVIEDO, 4 May. (EUROPA PRESS) - El presidente del Principado de Asturias, Vicente Alvarez Areces, defendió la participación activa de las instituciones públicas en el proceso de la OPA de Mittal sobre Arcelor, aunque subrayó que el funcionamiento "lógico" del mercado es que sean los accionistas quienes tengan la última palabra. En declaraciones a Europa Press, Areces afirmó que gobiernos como el suyo "tienen que tomar una posición activa para la defensa de los intereses generales de la Comunidad y la pervivencia del empleo, asegurarse las inversiones y el futuro de las instalaciones", si afirmó que "es el funcionamiento lógico de las empresas y el mercado el que hace que los que tengan la última palabra sobre el proceso sean los accionistas". El presidente asturiano resaltó la relación existente con Arcelor, en la que los agentes sociales son "interlocutores en la formulación del futuro de las empresas". Según explicó, se trata de "un modelo social donde las organizaciones sindicales buscan siempre el marco de negociación de la empresa; es un modelo muy identificado con lo que se puede llamar cultura industrial europea", dijo. "Nosotros (el Gobierno asturiano) hemos mantenido con Arcelor una actitud institucional hasta ahora muy respetuosa y ha sido recíproca", y recordó que el Ejecutivo Regional ya se ha reunido en varias ocasiones tanto con el presidente de la empresa Joseph Kinsh, y el consejero delegado, Guy Dollé, como con las autoridades luxemburguesas y comunitarias, que también se han desplazado al Principado. ASTURIAS, "LA JOYA DE LA CORONA". Subrayó que Asturias es "la joya de la corona" de Arcelor, y recordó las inversiones públicas realizadas en el pasado con el objetivo de "sanear esa siderurgia para producir procesos de adaptación y reconversión para miles de empleos, la modernización de las instalaciones y el desarrollo tecnológico puntero de las mismas". En su opinión, esta "fortísima intervención pública" es un factor que "legitima (al Gobierno asturiano) aún más para tener una presencia activa en ese proceso". Sobre el presidente de Mittal, el empresario Lakshmi Mittal, Areces explicó que se ha reunido "con todo respeto" con él para escuchar sus planteamientos. "El nos ha trasladado aspectos de garantías para el mantenimiento del empleo y de las instalaciones y ha respondido a una serie de interrogantes que nosotros le planteamos durante más de tres horas", aclaró. A la pregunta de si Mittal representa un peligro para el modelo industrial de Arcelor, Areces respondió que "se van a utilizar todos los mecanismos que estén en nuestras manos para que no sea así". "Preferimos el modelo que conocemos y con el que hemos mantenido excelentes relaciones institucionales", explicó. Subrayó que la postura de Mittal, en caso de que triunfe la OPA, es que "mantiene, al menos públicamente y explícitamente, compromisos de vigencia del modelo actual de Arcelor". "Esa es la situación que tenemos, y no tengo que tener temores de que eso cambie. En cualquier caso, la sociedad asturiana se va a volcar, y el Gobierno al frente, para que la situación de Arcelor siga en el futuro, no solo como hasta ahora, sino todavía mejor", manifestó. Expresó el deseo de su Gobierno de que "la empresa siga manteniendo todos los compromisos e incluso en algunos casos con nuevas actitudes de colaboración como las que se prestaron aquí recientemente en torno a desarrollos comunes junto con el Principado y otras empresas asturianas y también la potenciación de la investigación desarrollo e innovación". SIN PRONOSTICOS SOBRE LA OPA. "No puedo hacer predicciones, porque serán finalmente los accionistas quienes lo tengan que decidir, pero sin duda el momento que vive la empresa es muy positivo, lo mismo que es la situación que ahora vive Asturias y el futuro que aborda su sector industrial", afirmó. En este sentido resaltó que el escenario actual proporciona "unas bases mucho más sólidas que en el pasado", cuando se daba una excesiva dependencia de una empresa pública "que a veces tenía en sí misma el germen de su propia crisis por la falta de competitividad". Por el contrario, hoy este escenario "ha quedado superado por una diversificación de la economía asturiana y particularmente por una pujanza de su sector industrial que creo que estamos potenciando de manera adecuada, como demuestran los últimos resultados que estamos teniendo", explicó. Areces recordó que en el primer trimestre de 2006 se crearon en Asturias 18.000 empleos, de los que el 60% eran mujeres, y la mayoría vinculados al sector industrial. "Creo que la tendencia que tenemos es la de fortalecer un sector industrial que sigue modernizándose, siendo competitivo y con peso específico en la economía de Asturias superior al del resto del país", explicó. "Como conclusión, creo que para Arcelor, Asturias sigue siendo uno de los lugares estratégicos de la empresa en el mundo, por su posición, por la modernidad de sus instalaciones, por la cualificación de sus trabajadores y por los desarrollos que tienen previstos. Serán los accionistas los que tengan la última palabra, aún cuando nuestro deseo es que la empresa siga manteniendo todos sus compromisos", concluyó.
