Esperanza Fernández dice que el modelo de integración clásico ha quebrado y aboga por personalizarlo

Actualizado: lunes, 21 febrero 2011 20:37

Destaca la necesidad de actuar conforme a los "tres ejes que vertebran las desigualdades sociales: la edad, el género y la etnia"

MADRID/OVIEDO, 21 Feb. (EUROPA PRESS) -

La concejala delegada de Servicios Sociales del Ayuntamiento de Gijón (Asturias), María Esperanza Fernández Puerta, ha afirmado este lunes que el modelo antiguo de integración social, "basado en el empleo asalariado y las relaciones de solidaridad familiar y comunitaria, ha quebrado", al tiempo que ha defendido generar programas estratégicos de ayuda destinados a grupos e individuos determinados, con el objetivo de mejorar la eficacia y evitar la repetición o yuxtaposición de los servicios.

Durante una sesión en el Senado de la Comisión Especial de estudio sobre las nuevas formas de exclusión social como consecuencia del fuerte incremento del desempleo, Fernández ha insistido en que "la exclusión social no es una cuestión de ingresos" sino una "consecuencia" de otras desventajas en otros ámbitos sociales y personales de la vida, y ha criticado que los modelos de integración se sigan estructurando en base a "indicadores materiales como el trabajo o el salario, y relacionales, como la familia y las redes de apoyo". "La exclusión no se puede reducir a indicadores económicos", ha subrayado.

De esta forma, ha incidido en la necesidad de actuar frente a los tres principales ejes que "vertebran las desigualdades: la edad, el género y la etnia o raza", a través del desarrollo de estrategias que tengan en cuenta los "hechos biográficos" que determinan las vidas de la personas y que repercuten en su exclusión.

"Las mujeres presentan índices de exclusión superiores a los de los hombres en todas las tipologías de riesgo, la edad es también clave en las trayectorias vinculadas a ciclos vitales y los inmigrantes son una categoría muy vulnerable por la ausencia de redes de apoyo estructuradas", ha explicado.

Según ha considerado, "un nuevo concepto de exclusión remite a la multidimensionalidad, a las desventajas en diversos ámbitos vitales y a circunstancias que añaden mayor intensidad a los problemas", pero siempre dentro de un "proceso" social que debe ser entendido.

Así, Fernández ha apostado por desarrollar iniciativas que fomenten la participación de las personas en tres ámbitos: el mercado, la redistribución que llevan a cabo los poderes públicos, y las relaciones de reciprocidad en la familia y en los apoyos sociales.

"La crisis de este modelo no sólo exige políticas generales centradas en el mercado de trabajo o en la educación, sino medidas dirigidas a personas y grupos concretos, con la intención de focalizar en población concreta recursos y ayudas subsidiarias para atender a las personas cuya vida no queda asegurada por la base del trabajo", ha señalado la concejala, al tiempo que ha destacado que las experiencias que inciden en estos tres elementos anteriores han sido "las más acreditadas".

"Remover la exclusión, crear contextos relacionales que favorezcan el desarrollo de habilidades y competencias de las personas, y activar los recursos vitales de las mismas", ha permitido, según la dirigente socialista, unir "sujeto, contexto y la estructura", cuya activación "debe incorporar los elementos de la subjetividad". "No se pueden separar los elementos de la subjetividad, la integración necesita políticas de segunda oportunidad que ofrezca a las personas la posibilidad de desenvolverse dentro de unas garantías mínimas", ha matizado.

CRECE LA PRECARIEDAD EN GIJÓN, PERO TAMBIÉN LAS AYUDAS

Respecto a la labor del Ayuntamiento de Gijón, la concejala de Asuntos Sociales ha resaltado la situación "de crisis" que vive el país entero, aunque, no obstante, se ha congratulado de la situación que atraviesa el Consistorio gijonés en este ámbito ya que el número de ayudas ha crecido y el nivel de prestaciones se ha mantenido o incrementado, al igual que ha ocurrido en el terreno presupuestario.

Fernández ha informado de que, durante 2010 un total de 25.589 personas fueron atendidas por las unidades de servicios sociales de Gijón, lo que supone un 25,7 por ciento más que en el año 2008. De éstas, 12.587, un 30,5 por ciento más que en 2008, recibieron alguna prestación económica. Un aumento que Fernández ha atribuido en gran parte "al desempleo y aumento de las situaciones de precariedad", aunque también ha recalcado el "envejecimiento" de la población en la ciudad, cuyo índice "establece que por cada dos personas mayores hay un niño", así como la extensión de "los derechos y políticas sociales".

En este sentido, ha destacado el programa del salario social básico, que ha dado cobertura a "1.830 titulares y unos 3.100 beneficiarios indirectos" y que, desde el Ayuntamiento "se está aprovechando para completar con el diseño de itinerarios de integración social destinados a colectivos", al tiempo que ha valorado la ejecución del programa 'Senda' de ayuda a las mujeres "con cargas familiares no compartidas", el desarrollo de talleres y de apoyo al colectivo gitano.

Además, ha dicho, "contamos con un sistema de ayudas económicas", cuyas prestaciones se dividen en partidas "periódicas", integradas "dentro de una metodología de trabajo", y partidas destinadas a "atender emergencias y necesidades excepcionales", que no se suelen ofrecer de manera regular. "Durante el año 2010, se dieron 10.516 ayudas económicas, un 34,37 por ciento más que en el 2009, de las que el 16 por ciento han correspondido a emergencias, con una asignación de 10.418.804 euros", ha referido.

En este sentido, el Ayuntamiento gijonés ha proporcionado 3.556.000 euros para ayudas al alquiler y 103.330 euros para sufragar la red de atención a las personas "sin hogar" puesta en marcha el pasado noviembre junto a una serie de entidades dedicadas a la atención social. En este sentido, la concejala ha desvelado que el aporte financiero de la administración, junto a la labor de las entidades sociales, ha permitido generar un programa con 46 servicios o programas, a la vez que profundizar en la "coordinación" y eficiencia de las ayudas.

Asimismo, el ayuntamiento de Gijón proporcionó 1.449 becas escolares, lo que supone un 47,4 por ciento más respecto al 2007-08.