Evacuado por motivos de salud uno de los cinco mineros encerrados en el pozo Santiago, en Aller

Actualizado: jueves, 7 junio 2012 17:42

OVIEDO, 7 Jun. (EUROPA PRESS) -

Los servicios médicos de Hunosa han evacuado a primera hora de la tarde a uno de los cinco mineros encerrados en el pozo Santiago, en Aller. El trabajador aseguró sentirse mal durante una visita rutinaria de los médicos y fue trasladado, poco después, en ambulancia al hospital Álvarez Buylla de Mieres. Todo indica que presenta un cuadro de ansiedad.

Según han informado fuentes de la empresa minera, la salida del trabajador se produce después de que esta madrugada otro de los encerrados en Candín fuera evacuado con una crisis nerviosa. La visita médica de este jueves es la sexta que llevan a cabo los doctores desde que arrancó la protesta.

Los otros ocho mineros que permanecen encerrados desde hace once días en los pozos Candín, en Langreo, y Santiago, en Aller, se encuentran "bien de salud y animados aunque cansados", según los médicos de Hunosa que les han visitado este mediodía. No obstante, no se descartan nuevas evacuaciones.

Los sanitarios aseguraron que los encerrados en Candín "estaban cansados por el ajetreo de la noche y la preocupación por el compañero evacuado" y les informaron de que de que ya se ha recuperado de su crisis nerviosa. Junto a los doctores, también entraron al pozo los delegados mineros de seguridad.

El Grupo Hunosa mantiene a sus servicios médicos en alerta las 24 horas del día desde el primer día de los encierros. El operativo sanitario dispuesto por la empresa está compuesto por dos médicos, seis asistentes técnicos sanitarios y dos ambulancias. Los médicos ya visitaron a algunos de los encerrados el primer día de la protesta, mientras que los enfermeros están presentes a pie de pozo durante toda la jornada.

Los servicios sanitarios se encargan además de que uno de los trabajadores, aquejado de asma, esté provisto de medicación e inhaladores.

Los servicios médicos están en contacto continuo con el delegado minero de seguridad, el maquinista de extracción y el embarcador, que también forman parte del equipo de emergencia diseñado por Hunosa, con presencia continua en la instalación.

El delegado minero de seguridad visita cada mañana a los trabajadores e informa de su situación, al igual que el embarcador, que es el encargado de servir la comida a los encerrados entre las diez y las once de la mañana, entre las dos y las tres de la tarde y entre las diez y las once de la noche, aproximadamente. Ambos suelen informar a los encerrados de las novedades del exterior aunque la empresa mantiene operativo, por razones de seguridad, el servicio telefónico que permite comunicarse desde el pozo.

Los mineros están provistos de colchonetas y mantas y han improvisado un sistema de ducha con las conducciones de agua internas de la mina.

Por otra parte, la empresa mantiene activos, también por razones de seguridad, los servicios mínimos negociados con los sindicatos en los pozos, que funcionan desde el inicio de la huelga sin que se hayan registrado incidentes.