OVIEDO, 2 Jul. (EUROPA PRESS) -
La Comisión Ejecutiva de la Federación Asturiana de Concejos (FACC) acordó este viernes, 2 de julio, a propuesta de su Presidenta, dirigirse al Ministerio de Hacienda y a la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) para que se articulen medidas tendentes a paliar los efectos que sobre los presupuestos municipales pueden tener las liquidaciones de 2020 y 2021 de la participación de las Entidades Locales en los ingresos del Estado, que previsiblemente obligarán a los Ayuntamientos a devolver un significativo porcentaje de los adelantos recibidos por este concepto.
En concreto, la FACC planteará tanto al Ministerio de Hacienda como a la FEMP que las devoluciones a las que deban hacer frente los Ayuntamientos tengan, al menos, dos años de carencia, se programen en anualidades a largo plazo y no conlleven el pago de intereses de demora.
La Comisión Ejecutiva expone que, entre los efectos de la pandemia de la Covid-19 sobre las Administraciones Públicas, destaca una significativa reducción de los ingresos tributarios, circunstancia que también afecta a las Entidades Locales. Ante esta previsible situación se acuerda solicitar las citadas medidas para limitar los efectos negativos que estas devoluciones puedan tener sobre los presupuestos municipales.
HÓRREOS, PANERAS Y CABAZOS
Por otra parte, la Comisión Ejecutiva ratificó el documento de consideraciones aprobado por las Comisiones de Desarrollo Rural y Cultura, Turismo y Política Llinguística sobre el borrador de modificaciones del reglamento que rige sobre hórreos, paneras y cabazos.
Las aportaciones de la FACC sobre el borrador en el que trabaja la Mesa del Hórreo reclaman simplificar y flexibilizar la normativa para que, sin menoscabo de la tipología y valor etnográfico de estas construcciones, se facilite actuar sobre sus emplazamientos, equipamientos o materiales, así como su destino a nuevos usos.
Entre otras cuestiones se plantea una evaluación previa sobre el alcance de las medidas de protección que se quieren aplicar y, concretamente, sobre cuántas de las casi 15.000 construcciones catalogadas se verán afectadas por la figura de 'protección integral', que impide su destino a actividades distintas a las tradicionales de granero y almacenaje de enseres y herramientas.
De no actuar en esta dirección, según expone la FACC en sus consideraciones, la paulatina disminución del sector primario y la despoblación y envejecimiento de las áreas rurales conducirán al progresivo abandono de hórreos, paneras y cabazos, lo que a la larga supondrá la pérdida de un importante valor etnográfico.
