GIJÓN 21 Abr. (EUROPA PRESS) -
La catedrática de Filosofía Moral y Política en la UNED y consejera de Estado, Amelia Valcárcel, señaló hoy en Gijón que si el velo islámico se ve como un símbolo religioso no debería estar en el espacio público y añadió que si se ve como símbolo cultural, se traduce en que las mujeres deben dar obediencia y respeto a los varones, contra lo que dice la Constitución "claramente" de que hombres y mujeres son iguales.
Así lo manifestó sobre la polémica del velo islámico en los colegios antes de participar en las Jornadas de Educación Afectivo-Sexual celebradas en Laboral Ciudad de la Cultura. Valcárcel indicó que para la mujer es muy difícil manejas los aspectos afectivos y apuntó que la novedad es la libertad sexual.
En este sentido, señaló que eso exige un manejo distinto de los afectos por parte de las jóvenes, que lleva a la confusión de la mayor parte de ellas. Aunque parezca contradictorio, la catedrática explicó que la confusión viene "de la cosa más maravillosa que tenemos, que es la libertad". "Los afectos son movimientos completos de las emociones, que se resisten a la razón", dijo. "Es un problema que todas las jóvenes tienen", apostilló.
En cuanto a la violencia de género, apuntó que si las generaciones se siguen unas a las otras igual que los árboles echan flor en primavera, harían falta todas las del mundo porque las cosas no cambian así, sino sólo, según ella, si decidimos que eso pase.
En su opinión, lo que hace falta es regular las ideas con las que regulamos lo que hacemos. A este respecto, explicó que las mujeres tienen un nuevo campo de libertad y lo usan, pero cosa distinta es que los varones estén de acuerdo en ello. "Parece que algunos no, hasta el extremo final de la violencia extrema", afirmó.
Valcárcel advirtió sobre que no se debe pensar que las generaciones futuras son mejores por venir detrás, ya que, cuando se nace, nacemos todos igual, es decir, "más o menos desnuditos y con pocas ideas en la cabeza", dijo.