El secretario general de UGT en Asturias, Javier Fernández Lanero, antes de participar en una jornada del sindicato en la 68 Feria Internacional de Muestras de Asturias, en el recinto ferial gijonés 'Luis Adaro'. - EUROPA PRESS
GIJÓN, 5 Ago. (EUROPA PRESS) -
El secretario general de UGT en Asturias, Javier Fernández Lanero, ha asegurado este martes en Gijón que la reducción de la jornada laboral a 37,5 horas semanales es "innegociable".
Así lo ha indicado, en declaraciones a los medios de comunicación, antes de participar en una Jornada informativa del sindicato, a cargo de la secretaria confederal de Salud Laboral de UGT, Patricia Ruiz, en la 68 Feria Internacional de Muestras de Asturias, en el recinto ferial gijonés 'Luis Adaro'.
"No podemos estar regulando las relaciones laborales del siglo XXI con legislaciones normativas y con leyes del siglo XX", ha advertido Fernández Lanero, quien ha recalcado que el Estatuto de los Trabajadores data de principios de los años 80 y la Ley de Prevención de Riesgos Laborales del año 95.
Según el dirigente sindical, se está regulando unas nuevas relaciones laborales basadas en un nuevo modelo productivo, como pueda ser a través de la Inteligencia Artificial (IA), la robotización las nuevas tecnologías, pero con leyes del siglo pasado, que no contemplan ninguna de las nuevas formas de relacionarse laboralmente entre empresas y trabajadores.
Ha insistido, por ello, en que para UGT la reducción de jornada es "indiscutible, innegociable", a lo que ha remarcado que no conoce ni a un solo trabajador de Asturias o de toda España que no quiera que se reduzca la jornada.
Unido a ello, ha recalcado que no se pueden mezclar los intereses políticos, de Gobierno, con lo que son las necesidades y lo que los trabajadores quieren.
En su opinión, no es solo una reducción de jornada, sino que además es una racionalización de horarios, una desconexión digital, por lo que debe ir acompañada de un registro horario digital, conectado con la Inspección de Trabajo.
Por otro lado, ante el rechazo de los empresarios, ha incidido en que la productividad no está en la presencialidad sino en el talento de los trabajadores. Al tiempo, ha señalado que la productividad la producen las nuevas formas de inteligencia artificial, la eficacia en la gestión, la organización del trabajo y la formación a los trabajadores.
También se ha mostrado en contra de que la reducción de jornada se deje para la negociación colectiva. Para él, las leyes son las que establecen los límites en los que luego la negociación colectiva prospera y avanza.
Ha recalcado que las 40 horas es algo de hace 40 años y ha agregado que ahora se hace lo mismo con menos trabajadores y, el beneficio del ahorro de personal, se lo queda la empresa.
Frente a ello, UGT quiere que se redistribuya ese beneficio entre los trabajadores, subiendo salarios y reduciendo jornada. Además, ha advertido de que cuando se deja algo a la negociación colectiva, los sindicatos encuentran que hay una línea roja que las empresas marcan para no reducir la jornada. También ha llamado la atención sobre que hay empresas que no tienen convenios colectivos propios y ni siquiera hay representación sindical, lo que haría muy difícil negociar, y mucho menos en materia de jornada de trabajo.
Fernández Lanero, unido a todo ello, ha puesto el ejemplo de Navarra, que ya tiene las 37,5 horas implantadas. El dirigente sindical se ha preguntado qué problema hay que un restaurante en vez de cerrar a las 12 y media cierre a las 11.
"Es adaptarse a una nueva normativa y funcionar", ha asegurado, antes de añadir que no puede haber ni existir "ninguna disculpa ni ningún problema". Por todo ello, ha mostrado su deseo de que el Parlamento de España en septiembre lo apruebe. Incuso ha opinado que, si bien no lo soluciona, sí que ayuda a paliar el problema de la desigualdad de género por implicar una mejora de la conciliación.
Respecto a empresas pequeñas y micropymes que puedan tener problemas de turnos, ha indicado que en la negociación que está habiendo se están introduciendo sistemas que permiten a estas procesos temporales de adaptación, incluso con ayudas económicas. "Nosotros en eso estamos dispuestos", ha afirmado, aunque ha recalcado que no hay ningún problema porque ya existe en Navarra.
Ruiz, por su parte, ha tildado de "argumentos fallidos" los usados por la patronal para posicionarse en contra de esta reducción de jornada, como también hicieron en el año 83, cuando se redujo de 44 a 40 horas semanales y además se ampliaron las vacaciones remuneradas de 23 días a 30 días.
Sobre que las pequeñas y medianas empresas lo van a pasar fatal según las empresas, ha recalcado que, según un estudio, el tamaño de la empresa no importa y, para ella, prueba de ello es Navarra. "Tiene los salarios más altos, la jornada más baja, y además los tamaños de empresas más pequeñitos son el 80% entre una y dos personas trabajadoras". Además, todos los sectores productivos de este país ya tienen al menos 37 horas y media.
A su juicio, ahora en septiembre tienen los grupos parlamentarios tienen la oportunidad de reducir la jornada laboral después de 42 años y de mejorar, como en el 83, la economía, la salud mental de las personas trabajadoras, e incluso el impacto en el Medio Ambiente.
Ha remarcado, también, que dos tercios de la ciudadanía española ven "justa y necesaria" la reducción de la jornada y además la entienden como "técnicamente posible".
Ruiz, por ello, ha dicho no entender que los tres partidos que han presentado una enmienda a la totalidad, Junts, PP y Vox, estén "de espaldas a sus votantes".
"Deberían tener una reflexión y deberían tener, si me permiten, vergüenza y por lo menos darnos la oportunidad a la sociedad de conocer sus argumentos, si son en contra, que los digan, porque no los hay, pero si los hay, que los digan y por lo menos la oportunidad de que debata el Parlamento español sobre la conveniencia o no de esta medida", ha animado.
A mayores, les ha invitado a que, si lo ven conveniente, introducir algunas medidas que no estén en el acuerdo alcanzado entre los sindicatos y el Gobierno y que se pueda complementar este con las posiciones parlamentarias.
"En septiembre hay una oportunidad histórica de avanzar hacia un futuro acorde con la nueva normalidad de las empresas en la que la productividad y la tecnología está presente y es el momento ya después de 42 años de que en el Estatuto de los Trabajadores también esté presente una reducción de la jornada legal, porque la trampa de ir a la negociación colectiva ya es muy vieja", ha remarcado la responsable sindical.