El Principado atribuye la bajada de partículas PM10 al cese de la actividad industrial y al descenso del tráfico

Autovía del Cantábrico, A-8
Autovía del Cantábrico, A-8 - EUROPA PRESS - Archivo
Publicado: miércoles, 15 abril 2020 17:53

"Es preciso tomar conciencia de que se pueden hacer muchas cosas con menos desplazamientos", señala el Gobierno asturiano

OVIEDO, 15 Abr. (EUROPA PRESS) -

La Consejería de Infraestructuras, Medio Ambiente y Cambio Climático del Gobierno asturiano ha informado este miércoles de una "notable mejoría" de la calidad del aire en la zona central de Asturias desde la declaración del estado de alarma por el nuevo coronavirus.

Por lo que se refiere a la concentración de partículas PM10 (de tamaño inferior a 10 micras), el informe elaborado por el Principado señala que se ha rebajado hasta un 30% en las estaciones de la red regional, especialmente durante las dos últimas semanas, en las que la actividad no esencial estuvo suspendida.

La disminución de los niveles medios de PM10 durante la hibernación de la economía respecto a la concentración media anterior al estado de alarma fue de entre un 11 y un 30% de media. Según el Ejecutivo, esa bajada obedece tanto al cese de actividades industriales no esenciales como al descenso del tráfico y ha sido más visible en las últimas dos semanas, en las que sólo la industria considerada esencial ha funcionado en Asturias.

También señalan la calidad del aire "ha mejorado notablemente" desde el 30 de marzo aunque algunos grandes centros industriales, como Arcelor o Asturiana de Zinc, no han suspendido actividades.

La variación de PM10 fue diferente en la primera fase del confinamiento, cuando aumentó, debido a los episodios de intrusión de aire subsahariano que se produjeron del 18 al 23 de marzo. Según el Principado, esa masa de aire provocó la llegada de partículas en suspensión y dio lugar a un incremento de la concentración de PM10 en la atmósfera, cuyo origen no se relaciona directamente con la industria sino con causas naturales. El aumento en ese periodo varió entre un 6% de media en las estaciones de Gijón a un 39% en Oviedo, donde las partículas se concentraron en mayor medida.

La concentración de dióxido de nitrógeno (NO2), uno de los gases contaminantes que miden las estaciones de calidad del aire de la red del Principado y que está muy ligado al tráfico urbano, ha disminuido hasta el 68% en Gijón, el 62% en Mieres y el 50% en Oviedo, Sama y La Felguera.

La viceconsejera de Medio Ambiente y Cambio Climático del Gobierno asturiano, Nieves Roqueñí, considera que la repercusión positiva del confinamiento en la calidad del aire invita a "reflexionar sobre la necesidad de modificar el modelo de vida habitual, que influye directamente en la contaminación e indirectamente en la salud de la ciudadanía que habita en ciudades llenas de tráfico".

A juicio de Roqueñí, cuando se supere la crisis sanitaria "es preciso tomar conciencia de que se pueden hacer muchas cosas con menos desplazamientos, como el teletrabajo o las reuniones por videoconferencia, lo que reduce notablemente la contaminación".

"Tenemos una gran oportunidad para iniciar un cambio de modelo, aprovechando este tipo de actividades que nos ayudan a disponer de un medio ambiente con menos emisiones y, por tanto, más saludable", ha agregado.