Chao SamartIn - GOBIERNO DE ASTURIAS
OVIEDO 28 Abr. (EUROPA PRESS) -
El director general de Cultura y Patrimonio del Gobierno de Asturias, Pablo León, ha destacado el "estricto control" bajo el que se han realizado todos los trabajos de recuperación del Chao Samartín.
León ha visitado este jueves el yacimiento acompañado por el alcalde de Grandas de Salime, Eustaquio Revilla, y los responsables de la supervisión técnica de las labores de restauración del castro. La visita se produce después de que el complejo reabriera al público la pasada Semana Santa.
"La comisión de seguimiento se ha reunido cada 15 días para evaluar, paso a paso, la evolución de las intervenciones y garantizar el cumplimiento de todas las prescripciones establecidas por el Consejo de Patrimonio Cultural. Además, un arqueólogo y una restauradora de la consejería han estado desplazados de continuo en el yacimiento", ha precisado Pablo León.
La comisión de seguimiento estuvo integrada por el director general de Cultura y Patrimonio, un representante del Ministerio de Cultura y Deporte, el jefe del Servicio de Patrimonio Cultural, y los directores de obra, los arqueólogos y la restauradora responsables del seguimiento de las obras.
Según ha informado el Gobierno asturiano, el "escrupuloso control" de la restauración permitió detectar un fallo en el comportamiento de uno de los morteros aplicados en las hiladas de sacrificio colocadas para proteger los muros.
No obstante, insisten en que la incidencia no afecta a las estructuras arqueológicas originales, pero ya se han encargado las pruebas necesarias para determinar el origen de esta anomalía. Los resultados de los ensayos se esperan para principios de mayo.
El director general de Cultura y Patrimonio, Pablo León, ha avanzado en su visita que, una vez recibidos los resultados, está previsto que los trabajos de reposición de las hiladas de sacrificio se realicen a lo largo del próximo mes, siguiendo las indicaciones técnicas que se prescriban.
Esas labores se desarrollarán, previsiblemente, entre mayo y septiembre, tratando de evitar la posibilidad de que las condiciones meteorológicas adversas, como las heladas fuertes, puedan interferir en la restauración. De este modo, quedarán completadas las actuaciones.