El 77% de los universitarios cántabros creen que las sentencias firmes de derribo deben cumplirse "siempre"

La mayoría de los alumnos de la UC creen que el medio ambiente cántabro está más protegido que en el resto de España y no ven alarmismo en los avisos sobre el cambio climático

Europa Press Cantabria
Actualizado: jueves, 5 febrero 2009 14:53

SANTANDER, 5 Feb. (EUROPA PRESS) -

El 77% de los estudiantes de la Universidad de Cantabria (UC) consideran que las sentencias firmes de derribo deben cumplirse "siempre", y que además, debería restaurarse el medio natural degradado por las construcciones ilegales e indemnizarse a los compradores "de buena fe" de las viviendas.

Este es una de las conclusiones que se desprende de la encuesta 'Opiniones y actitudes de los estudiantes de la Universidad de Cantabria sobre la situación del medio ambiente', elaborado por la UC con el apoyo de la Agencia Española de Cooperación Internacional (AECI) a través de preguntas entre 500 alumnos universitarios.

Los primeros resultados de este estudio fueron presentados hoy en rueda de prensa por Juan Carlos Zubieta y Ángel García Santiago, del Taller de Sociología de la UC; y Ángel Gómez, representante de Arca, asociación que ha asesorado en distintas partes de este trabajo.

Según explicó Zubieta, la encuesta muestra a unos jóvenes que opinan que Cantabria conserva su medio ambiente mejor que el resto del país, aunque piden a los políticos que dedican más recursos a su protección. El principal problema que les preocupa es la masificación urbanística, y culpan a promotores y constructores del deterioro del medio ambiente.

En cuanto a sus propios hábitos, muestran una actitud positiva hacia costumbres como el reciclaje y la separación de basuras, aunque manifiestan dudas cuando se les plantea que asuman los costes de la protección del medio ambiente o sobre sus efectos en aspectos como el cierre de industrias contaminantes.

URBANISMO Y DETERIORO MEDIOAMBIENTAL

El 77% de los encuestas respalda la necesidad de que se cumplan las sentencias firmes de derribo, lo que para Arca prueba que el trabajo de esta asociación está "en sintonía" con lo que piensa la población general, por lo que instó a los políticos a que tengan en cuenta estos datos a la hora de planificar la gestión del territorio.

Los universitarios cántabros responsablizan de las construcciones ilegales a las empresas constructoras (84%), los Ayuntamientos (84%) y el Gobierno regional (76%), mientras que descartan atribuírsela a los compradores de las viviendas. Un 60% de los estudiantes piensa que los municipios tienen "excesivas" competencias urbanísticas.

Además, Gómez incidió en que los jóvenes tienen la percepción de que los atentados ecológicos son "delitos" como pueden serlo los robos, "con lo que esto implica". En la encuesta, un 72% de los estudiantes cree que deberían endurecerse las penas por delitos ecológicos, y un 89% sostiene que las agresiones contra el medio ambiente "no están suficientemente perseguidas y castigadas".

Los promotores urbanísticos (74%) son, junto a las industrias (77%) los principales responsables del deterioro de la naturaleza en Cantabria para los estudiantes de la UC encuestados, que también señalan a las autoridades, por no ordenar el territorio y hacer cumplir las leyes (60%) y a los propios ciudadanos, por su actitud pasiva (un 49% piensa que tienen mucha responsabilidad, y un 37%, que intermedia).

En cambio, los estudiantes no achacan responsabilidad en el deterioro del medio a agentes como los trabajadores del sector primario, como ganaderos, pescadores y empresas forestales, o a los cazadores.

MEDIO AMBIENTE

En general, los universitarios cántabros aprecian, en un 57%, que la naturaleza de Cantabria está bien conservada (y un 36% que "regular"), una cifra que supera al dato nacional, que sólo ven protegido un 18% frente al 27% que creen que se protege mal en el conjunto del país.

La masificación urbanística, la contaminación de las aguas y la desaparición de suelos de alto valor agrícola son los principales problemas que perciben en el medio ambiente en Cantabria, aunque también apuntan a la contaminación atmosférica, el ruido o la gestión de residuos. En cambio, muestran juicios positivos sobre el estado del acceso y disfrute a las playas (%&%), la situación del arbolado, la fauna y la flora (40%) y los incendios forestales (41%).

En este sentido, el representante de Arca llamó la atención sobre el hecho de que los jóvenes no perciban como "atentados medioambientales" en Cantabria fenómenos como el del ruido o contaminación acústica y los incendios forestales. En el conjunto del país, la preocupación por los incendios forestales se eleva hasta un 54%.

Respecto a la labor de la Administración con la protección del medio ambiente, la institución que sale peor parada es la estatal (un 50% la juzgan regular y un 36% mala), seguida de los Ayuntamientos (48% regular y 36% mala). Respecto al Gobierno de Cantabria, un 48% la definen como regular, un 28% buena, y un 28%, mala. De las asociaciones ecologistas, el 39% considera que lo están haciendo bien, y el 40%, regular.

Los estudiantes dicen estar preocupados por los problemas medioambientales, pero sólo un 21% creen que su nivel de información es mucho o bastante, y la mayoría lamenta que ni los medios de comunicación ni el Gobierno de Cantabria informen correctamente sobre los problemas de la conservación de la naturaleza en la comunidad autónoma.

El 75% de los estudiantes rechazan que los recursos naturales sean inagotables, y un 77% considera que el deterioro medioambiental es cada vez más grave, mientras que un 64% descarta que sean exageraciones las alertas sobre que se produzca cambio climático.

HÁBITOS

En cuanto a sus hábitos, el 55% adopta con frecuencia medidas para reducir el consumo de agua y energía, el 60% colabora en tareas de recogida selectiva de papel y vidrio, y otro 60% emplea los puntos limpios para depositar objetos como muebles viejos o electrodomésticos.

Pero, si bien al 68% de los universitarios les gustaría tener más contacto con la naturaleza, las opiniones se dividen de forma "significativa" ante planteamientos como el pago de más impuestos para la conservación del medio ambiente --rechazada por un 32% y admitida por un 31%-- y la subida de precios con el mismo fin --55% a favor y 32% en contra--.

Por ejemplo, un 28% admitiría que se mantengan las industrias más contaminantes ya que si desaparecieran habría personas que se quedarían sin empleo, posibilidad que en cambio rechazan el 22% y en la que hasta un 50% muestran dudas.

Casi la mitad de los universitarios está en contra de que se instalara una central nuclear en Cantabria, también se oponen a proyectos como las centrales térmicas, un 45% duda sobre si se deben plantar o no más eucaliptos en la comunidad autónoma. El 78% pide que se fomente más el transporte público y los carriles bici.

ESTUDIO

La encuesta se ha realizado entre 500 estudiantes de la Universidad de Cantabria, seleccionados de forma proporcional y estratificada según la titulación y el sexo, y tiene un nivel de confianza del 95,5%. El responsable del estudio, Juan Carlos Zubieta, explicó que sus conclusiones pueden servir para el desarrollo de programas de educación ambiental.

Contenido patrocinado