Con esta reunión el CIMA finaliza el proceso de participación pública en esta cuenca
SANTANDER, 8 May. (EUROPA PRESS) -
La Consejería de Medio Ambiente ha recogido las propuestas de mejora ambiental de la cuenca del Nansa, planteadas en la mesa intersectorial de Carmona. Con esta reunión, el Centro de Investigación del Medio Ambiente (CIMA) concluye el proceso de participación pública desarrollado en dicha cuenca, iniciado el pasado día 2 de abril en Puentenansa.
La mesa intersectorial fue presentada por el alcalde pedáneo de Carmona, Jaime Borbolla; el jefe de Planificación de la Confederación Hidrográfica del Cantábrico (CHC), Jesús González Piedra; la directora general de Obras Hidráulicas y Ciclo Integral del Agua, Ana Isabel Ramos, y la directora del CIMA, Luisa Pérez.
Las representantes de la Consejería de Medio Ambiente agradecieron la respuesta de la población, tejido asociativo e instituciones de la comarca del Nansa por su implicación en el proceso de participación pública y señalaron "que dará sus frutos, porque servirá para planificar un futuro con mejor calidad ambiental para la cuenca".
En el encuentro, participaron representantes de la Confederación Hidrográfica del Cantábrico, Demarcación de Costas, MARE, Dirección General de Biodiversidad, de los ayuntamientos de Cabuérniga, Herrerías, Lamasón, Polaciones y Rionansa, Mancomunidad de Municipios del Nansa, Grupo de Acción Local Saja-Nansa, Junta Vecinal de Carmona, Instituto de Hidráulica de Cantabria, Saltos del Nansa, Tinamenor, Fundación Marcelino Botín, Asociación para la Defensa del río Nansa y afluentes, Sociedad Cántabra de Fomento de Caza y Pesca, UGAM-COAG, y AEMS-Ríos con Vida, entre otras entidades.
La reunión tuvo como objeto el debate y participación pública en torno a los contenidos del futuro Plan Hidrológico de la cuenca del Nansa, y en la misma, se trabajó sobre las conclusiones obtenidas en los encuentros realizados durante el proceso participativo e, igualmente, se plantearon nuevas propuestas de actuación.
Los asistentes se refirieron a la necesidad de establecer caudales ecológicos con un régimen de mantenimiento, de alcanzar un equilibrio entre los aprovechamientos hidroeléctricos y el entorno, rediseñar la escala de peces de la presa de Palombera, colocar dispositivos de paso de peces, sanear los núcleos de la que carecen de sistemas de depuración, implantar redes separativas de aguas pluviales en los pueblos del valle y, entre otras medidas, desarrollar un sistema de gestión de purines y otro de residuos de origen ganadero.
A partir de ahora, se trabajará sobre la base de las propuestas obtenidas para contribuir, con la Confederación Hidrográfica del Cantábrico, a la elaboración de un nuevo plan hidrológico de la cuenca del Nansa, fruto de las aportaciones ciudadanas y conforme a los criterios de la Directiva Marco del Agua, informó el Gobierno cántabro en nota de prensa.
