SANTANDER 5 Feb. (EUROPA PRESS) -
El 46 por ciento de los santanderinos comen fuera de casa a un precio medio de 10 euros, según una encuesta realizada en enero de 2013 por la Federación de Usuarios-Consumidores Independientes, FUCI.
Dicho porcentaje es inferior al de 2010, cuando el 55% de los ciudadanos de la capital comían fuera del hogar, también con un coste medio de diez euros, según el informe, consultado por Europa Press.
La Federación de Usuarios-Consumidores Independientes, FUCI, ha realizado un estudio, en varias ciudades españolas, para conocer los hábitos alimenticios de los consumidores en relación con su jornada laboral.
De este informe se desprende que seis de cada diez españoles comen fuera de casa al no tener tiempo suficiente para regresar a su hogar. Esta situación se da, especialmente, en las grandes ciudades, mientras que en las más pequeñas como Toledo, Cáceres, La Rioja o Santander el porcentaje es considerablemente inferior.
Respecto al gasto, que varía según las rentas de cada individuo y la decisión de donde comer, oscila entre los 100 y los más de 300?. Así, el coste medio por persona en España es de más de 217 euros al mes, es decir, un 15% menos respecto al último estudio de FUCI del año 2010.
El estudio muestra también que la elección de los platos depende de cada ciudad y está ligada al clima. Así, en ciudades del norte optan por platos de cuchara, mientras que en el Levante eligen más las verduras aunque, en líneas generales, los consumidores se decantan más por la carne que el pescado.
Respecto a la bebida elegida para acompañar las comidas, cuatro de cada diez encuestados opta por el agua. En el caso de las bebidas alcohólicas, se prefiere cerveza a vino.
Por otro lado, la mayoría de los consumidores elige restaurantes cercanos a su lugar de trabajo que disponga de menús económicos con comida casera, frente a la denominada comida rápida o 'fast food'. Por edades, entre los 18 y 35 años se opta mayoritariamente por la tartera y entre los 30 y 50 años eligen el menú del día.
Por precio, varía en función de la ciudad ya que, comer de menú del día en Madrid supone unos 280 euros al mes, mientras que en Cáceres o Toledo esa cantidad se reduce a 180 euros.
RECLAMACIONES
El estudio también señala que, aunque más de la mitad de los encuestados reconoce que alguna vez en su vida se han sentido engañados a la hora de comer, sólo un 6% asegura que ha puesto una reclamación para denunciar algún tipo de agravio.
Entre las quejas más comunes se encuentran las facturas inadecuadas (51%), mal servicio (23%), falta de higiene (11%), exposición inadecuada de alimentos (6%), inexistencia de lista de precios (5%), negación de las hojas de reclamaciones (3%) u otras (1%).
FUCI recuerda que, en materia de restauración --restaurares, bares y cafeterías-- existen una serie de obligaciones que deben cumplir los establecimientos y que los consumidores deben tener en cuenta a la hora de acudir a uno de ellos.