Una magistrada y una fiscal informaron a los adolescentes sobre 'ciberbullying' y 'grooming'
SANTANDER, 13 May. (EUROPA PRESS) -
El Tribunal Superior de Justicia de Cantabria (TSJC) ha recibido la visita de un centenar de estudiantes de Secundaria para participar en una jornada formativa sobre ciberacoso y otros delitos con participación de menores cometidos a través de Internet o la telefonía móvil.
La magistrada de la Audiencia Provincial Paz Aldecoa y la fiscal del Tribunal Superior María Angeles Sánchez Tapia han impartido una charla a escolares de segundo y de tercero de ESO del Colegio Atalaya de Santander y de cuarto del Instituto El Astillero acerca de las conductas que dan lugar a ciberacoso y a 'grooming' (acoso de un mayor a un menor con finalidad sexual y cometido a través de Internet).
Amenizada con vídeos, la charla ha consistido no sólo en la explicación de estos fenómenos, sino también de las consecuencias jurídicas de los mismos, con el objetivo final de prevenir en los menores conductas poco seguras cuando se ponen delante de un ordenador.
Según explica el TSJC en nota de prensa, en el caso del 'cyberbullying' o ciberacoso, los menores pueden ser tanto víctimas como infractores, y es que se trata de aquellas situaciones en las que un menor se siente atacado por parte de otro menor de su entorno y de manera continuada mediante el uso de sms, correos electrónicos o las redes sociales.
Esos ataques, que suelen ser anónimos y además tienen una gran repercusión si se realizan en foros públicos, pueden traducirse en conductas delictivas como amenazas, coacciones, injurias o calumnias.
Por su parte, el 'grooming' se produce cuando un adulto comunica a través de Internet con un menor con la intención de satisfacer sus deseos sexuales. Para ello, suele hacerse pasar por menor y, tras entablar amistad y lograr alto grado de confianza, pide a su víctima que encienda su webcam con el fin de capturar su imagen.
Con ejemplos de recientes sentencias sobre casos de ciberacoso, las dos juristas han aconsejado a los estudiantes que si se ven inmersos en cualquiera de estas situaciones lo pongan en conocimiento de un adulto, ya que es el único modo en que el acoso o el 'grooming' pueden cesar.
