Astillero y Los Corrales, próximas citas del circuito escénico Itinerarte

SANTANDER, 29 May. (EUROPA PRESS) -

El programa escénico 'Itinerarte', promovido por el Gobierno de Cantabria, llevará la producción de La Machina teatro 'En alta mar' a las localidades del Astillero y Los Corrales de Buelna. La primera será este jueves, día 30, en la sala Bretón, a las 20:00 horas, y la segunda será en el teatro municipal el sábado 1 a las 20:00 horas.

Esa producción fue reconocida con el premio Max al mejor espectáculo revelación en el año 2012. 'En alta mar' es original de Slawomir Mrozek, y está interpretada por Patricia Cercas, Rita Cofiño, Fernando Madrazo y Luis Oyarbide, dirigidos por Paco Valcarce.

La obra participa de las propiedades habituales en la producción dramática de su autor; es decir, refleja una visión crítica del mundo contemporáneo a través de unos personajes que, enfrentados a determinadas situaciones sociales, llevan hasta el límite la lógica de los estereotipos que simbolizan y caen en el absurdo. La obra, caracterizada por una singular carga irónica, explora el comportamiento humano, la alienación y el abuso de poder.

'En alta mar' está protagonizada por tres náufragos que se ven obligados a tomar decisiones "políticas" para sobrevivir y soportar las condiciones de vida correspondientes a su soledad y falta de medios, incomunicación, etcétera.

Partiendo de un feroz conflicto, derivado del tema de la antropofagia, la obra aborda asuntos de vigencia permanente como la lucha de poder, la caprichosa organización de jerarquías y la distribución de la riqueza.

Ironía, juegos, alianzas, estrategias, histrionismo, burlas y humor* son ingredientes de este espectáculo que permite dar rienda suelta a la imaginación y penetrar en un mundo que refleja la esencia primaria del ser humano.

Con todo ello, 'En alta mar' se erige como un producto rico en su construcción discursiva al tiempo que, a través de un irreverente humor -a veces ácido, a veces ingenuo-, se manifiesta como una obra que establece una comunicación fluida con amplios segmentos de espectadores.

La puesta en escena se fundamenta, por una parte, en un cuidado trabajo interpretativo que combina la verosimilitud con la huida del naturalismo, debiendo desplegarse entonces todas las herramientas verbales y corporales de los actores. Y, por otro lado, el montaje mostrará un espacio escénico sugerente en el que, a modo de instalación artística dotada de iluminación propia, se visualizará el lugar de desarrollo de la acción: una balsa en medio del océano.

En este sentido, el espectáculo aspira a combinar el ejercicio dramático con un adecuado tratamiento plástico en el que no está ausente la experiencia visual de nuestro tiempo.