La Casa Museo José María Cossío acoge un encuentro sobre la figura del Padre Rábago

Casa Museo José María Cossío en Tudanca
FUNDACIÓN BOTÍN
Actualizado: martes, 17 diciembre 2013 20:45

SANTANDER, 22 Ago. (EUROPA PRESS) -

La Casa Museo José María Cossío, en la localidad de Tudanca, acoge este jueves, 22 de agosto, a las 19.30 horas, un encuentro sobre la figura de Padre Rábago organizado por la Fundación Botín en el marco de su programa 'Patrimonio y Territorio'.

En este evento, la figura y obra de Padre Rábago serán objeto de debate en una mesa redonda en la que intervendrá el catedrático de Historia Moderna y Contemporánea de la Universidad de Cantabria (UC), José Ignacio Fortea, según ha informado la Fundación Botín,

Este experto centrará su ponencia en el estudio de la dimensión pública del Padre Rábago, de su influencia en la adopción de medidas de carácter general y en cómo fue la negociación del concordato con la Santa Sede que regularizaba por primera vez en España las relaciones entre la Iglesia y el estado.

Por su parte, el profesor titular de Historia e Instituciones Económicas de la Universidad Autónoma de Madrid (UAM), Ramón Lanza, gran conocedor del pasado económico de la región, expondrá los hitos fundamentales de su evolución económica; y el profesor titular de Historia Moderna de la UC, Tomás Mantecón, abordará los intentos, sólo en parte conseguidos en la época del padre Rábago, de abordar la reforma de las costumbres en pos de una homogeneización de los ritos cristianos.

Por último, la alumna de doctorado de la UC y antigua becaria de la Fundación Botín Sara Pérez Ortega profundizará en el linaje de los Rábago y en la vida económica y social del entorno más inmediato en el que le tocó vivir.

PADRE RÁBAGO

Don Francisco de Rábago y Noriega es, sin duda alguna, una de las figuras más relevantes del panorama político, religioso y cultural de la España del siglo XVIII. Miembro de un linaje montañés del valle de Polaciones, donde nació en 1.685, don Francisco ingresó pronto en la Compañía de Jesús, ejerció docencia en Palencia, Salamanca, Valladolid y Roma para desarrollar desde entonces una fulgurante carrera.

Fue director de la Biblioteca Nacional de Madrid, confidente del Papa Benedicto XIV, confesor de Fernando VI desde 1747 y amigo y estrecho colaborador de algunos de sus ministros más destacados, como el Marqués de la Ensenada, cuya caída en desgracia en 1754 determinó la suya propia un año después. Desde entonces, hasta su muerte en 1763, vivió apartado de la vida pública.

Autor de numerosas obras de filosofía y teología, el padre Rábago destacó asimismo por su activa presencia en la política de su tiempo, en la que ejerció una gran influencia por su proximidad al rey y a sus ministros interviniendo de manera positiva en alguna de las decisiones más trascendentes que se tomaron en una España sujeta a profundas transformaciones en la época que le tocó vivir.