SANTANDER, 7 May. (EUROPA PRESS) -
El predominio de los vientos del sur y las irregulares tormentas han dejado un abril extraordinariamente cálido en Cantabria, el más cálido o el segundo más cálido desde que hay registros, y con precipitación abundante en los valles del Ebro y escasa en la costa oriental, según la Delegación Territorial de la Agencia Estatal de Meteorología (AMET).
En su avance climatológico, la AEMET destaca que abril ha sido extraordinariamente cálido en la mayor parte de la región y solo en algunas zonas de montaña se ha rebajado este calificativo. Se trata del abril más cálido o el segundo más cálido desde que hay registros, en prácticamente todas las estaciones de Cantabria, por delante de los anteriores máximos de 2011 y 1987.
En la mayor parte de las estaciones ha sido el abril más cálido desde que existen observaciones, y en el conjunto de la región se sitúa como el segundo más cálido detrás de abril de 2011.
Abril fue más húmedo en el sur y en el oeste, y progresivamente más seco hacia el este y el norte.
Las tormentas dejaron más precipitación en las comarcas de Los Valles y Liébana, y en la cabecera del Saja y Nansa, y menos en la costa central y en los valles orientales.
En abril se produjeron tormentas frecuentes, típicamente primaverales, que dejaron abundante precipitación repartida de forma desigual. La Cordillera Cantábrica impidió que las tormentas alcanzaran el litoral, por lo que la lluvia resultó más abundante en el interior que en la costa.
Así, en Castrillo de Valdelomar se anotaron 9 días de tormenta; 8 días en Mataporquera; en Terán de Cabuérniga, 3; en Piñeres, dos; y uno en Santander-Aeropuerto.
La precipitación se agrupó en tres episodios. En el primero, en torno al día 6, cayó asociada a un paso frontal que concluyó con tormentas el día 7; el segundo, entre los días 10 y 13 en general, se prolongó en Liébana y en los valles del Ebro al menos hasta el día 18, en una sucesión de días de tormenta que dejaron más de la mitad de la precipitación total recogida en el mes. El tercero, en torno a los días 26 y 27, la lluvia cayó otra vez asociada con tormentas.
Las temperaturas estuvieron por encima de los valores normales, con anomalía superior a dos grados centígrados respecto de la media del periodo 1981-2010 en la mayor parte de las estaciones.
El mes que ha concluido se ha situado como el abril más cálido o el segundo más cálido desde que hay registros en prácticamente todas las estaciones de Cantabria, por delante de los anteriores máximos de 2011 y 1987.
Destacó el comportamiento de las temperaturas mínimas, con registros por encima de 15 grados el día 5 en Ramales, San Felices, Villacarriedo, o Santander/Parayas.
Con datos recogidos en el observatorio de Santander-CMT, la insolación ha estado en torno a la esperada en abril, contabilizando un total mensual de 140 horas.
El viento recorrió 7.767 kilómetros en el observatorio de Santander-CMT-, lo que representa un 13% menos de lo normal en el mes de abril.
Se registraron 200 descargas eléctricas sobre la región, procedentes de rayos, distribuidas a lo largo de diez días de tormenta.
Casi la mitad --94 descargas-- se produjeron con las tormentas del día 12, que estuvieron acompañadas también de chubascos y lluvia abundante.
VALORES EXTREMOS
La temperatura máxima más alta fueron los 27,2 grados centígrados el día 9 en Ramales de la Victoria y la mínima más baja los -4 grados registrados en Cubillo de Ebro el día 4.
La máxima precipitación recogida en 24 horas corresponde a los 51,2 litros por metro cuadrado el día 12 en Bárcena Mayor-Toriz, mientras que la racha máxima de viento fue de 90 kilómetros por hora el día 16 en Tresviso.
