SANTANDER, 26 Jul. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Asociación de Maltratados por la Administración (AMA), Antonio Vilela, ha advertido de que la Ley aprobada este lunes en el Parlamento cántabro en relación a las sentencias de derribo no es la "meta", sino sólo "el fin de una etapa" y, por tanto, "hay que empezar a trabajar en la siguiente", que es su desarrollo.
Así, en declaraciones a los periodistas tras la aprobación de la iniciativa, ha instado al Gobierno regional a ponerse a trabajar, porque tiene "mucho trabajo pendiente", y ha pedido también a los ayuntamientos que aborden "lo más rápidamente posible" las modificaciones urbanísticas precisas. Y es que, según dice, lo que no se puede hacer es legislar y dar pasos adelante para que después no se traduzcan en "resultados".
En cualquier caso, la aprobación de la Ley es motivo de "satisfacción" para los afectados, porque la solución a las sentencias de derribo ya no es sólo una declaración "de intenciones", sino que hay "una ley, y es para cumplir por todos".
Además, por encima del debate parlamentario suscitado en el Pleno en torno a la iniciativa, Vilela cree que "lo importante" es que hay "unanimidad" para dar una solución a los afectados.
En este sentido, el presidente de AMA ha incidido en la importancia del consenso y ha lamentado la postura de la asociación ecologista ARCA, promotora de los recursos que han conducido a las sentencias de derribo.
Vilela respeta su derecho a acudir a los tribunales o a las instituciones en contra de esta Ley, pero recalca que no tiene derecho a "insultar y descalificar" a los demás. "Llamar basura humana al que no está de acuerdo con sus posiciones, habla muy poco de la ética moral que tienen algunos", ha subrayado el presidente de AMA.
En su opinión, hay que "buscar todos el consenso", porque hay "gente totalmente inocente" que "sufre" por esta situación. Así, ha puesto el ejemplo de un matrimonio de avanzada edad (tiene 91 años el marido y 86 la mujer), o los que han fallecido ya y no podrán ver nunca sus viviendas regularizadas.
Precisamente, en aras del consenso, el presidente de AMA ha destacado lo que han cedido ya los afectados para que se apruebe una Ley que "no es ni con mucho" la que les hubiera gustado. Según dice, para llegar a un acuerdo "todo el mundo tiene que ceder" y los que más han cedido son los propietarios, porque "cada vez que se cedía, se cedía sobre el patrimonio o sobre derechos de los afectados".
Para Vilela, la Ley "tiene que hacer justicia" y se "ha dado un paso en ese camino". A su juicio, no se puede llegar "al absurdo" de derribar viviendas donde se puede volver a construir, y tampoco puede ser que los únicos que sufran la "pena" sean las familias cuando los condenados son el Gobierno y los ayuntamientos.
Por último, ha recordado que los jueces se "quejaban" de que necesitaban instrumentos para aplicar y ha resaltado que esta normativa no es sólo para los afectados, sino para todos los ciudadanos de Cantabria, ya que se pretende garantizar la seguridad jurídica en el ámbito urbanístico.
