AMP Cultura valorará la disolución de la Sociedad del Año Lebaniego al detectar un "agujero" de cinco millones de euros

SANTANDER, 11 Nov. (EUROPA PRESS) -

La Consejería de Educación, Cultura y Deporte valorará en los próximos días la disolución de la Sociedad Gestora del Año Jubilar Lebaniego, tras detectar la auditoría a la que le ha sometido la empresa MCB un "agujero" de cinco millones de euros entre los años 2008-2010.

Ese "agujero" no llegó a producir deuda en esta entidad pública porque era "tapado" con los fondos del Gobierno de Cantabria, su único socio y creador, según ha relatado el consejero Miguel Ángel Serna, acompañado del director general de Cultura, Joaquín Solanas.

Creada en 2006, esta sociedad se encarga de gestionar los patrocinios privados y actividades de promoción del Año Santo de Santo Toribio de Liébana, monasterio al que la tradición atribuye la custodia de un fragmento de la cruz de Cristo y lugar de peregrinaje para los católicos.

Tras revisar la auditoría, el sucesor del regionalista Francisco Javier López Marcano --candidato al Senado por el PRC en las elecciones generales--, concluye que su predecesor fue "muy irresponsable y negligente" en la gestión del dinero público.

Y lo hace apoyado tanto en los "pequeños detalles" como en las "grandes cifras".

Así, ha enumerado desde el "agujero" de 5 millones de euros, los 1,2 millones de euros que recibió el publicista Sergio Vélez entre 2007 y 2010, o los 430.000 a "comidas, hoteles y viajes" entre 2006 y 2010, que, de hecho, le han llevado a concluir que "más que una Sociedad del Año Lebaniego era una sociedad de autoturismo".

Serna ha puesto más ejemplos, como el pago de 500 euros mensuales del combustible del director general de la Sociedad, Carlos Higuera, pese a que eran más frecuentes los desplazamientos del personal de Potes a Santander, y no a la inversa.

O los costes salariales de los seis empleados: tres directivos que subcontrataban sus funciones y tres empleados, estos en el Centro de Estudios Lebaniegos, ubicado en la Torre del Infantado de Potes.

En las recomendaciones de la auditoría, que Serna llevará a la Intervención General de la Comunidad Autónoma y de la que se dará traslado al Parlamento, figura el ajuste de plantilla y la adopción de políticas de austeridad, entre otras.

POLÍTICAS CONTABLES "ERRÓNEAS"

En la descripción que han hecho los responsables de Cultura de la auditoría, se mencionan "políticas contables erróneas" que se tradujeron en pérdidas entre los años 2008 y 2010 que sumaban más de cinco millones de euros.

Serna ha proseguido relatando como en los viajes, ya en época de crisis, no se especificaba el detalle de los destinos, como vuelos a Madrid que en ocasiones costaron hasta 700 euros.

Y en lo relacionado con el personal, había seis empleados, tres de ellos directivos. El director general cobraba 75.000 euros al año; un jefe de administración con "cualificación profesional dudosa, 52.000; y otro, 36.000, sueldos que Serna considera "fuera de mercado".

Pero el caso es que para funciones administrativas se subcontrataba la gestión a una asesoría de Torrelavega, que cobraba por ello 18.000 euros, y la búsqueda de patrocinios a otra, gallega, que percibió un fijo de 130.000, lo que lleva a Serna a preguntarse "qué hacían" entonces los directivos.

Otras prácticas que ha citado son las facturas enviadas con posterioridad, y de forma secuencial, circunstancia que no ve "razonable" y sobre la que el consejero informará a la Intervención General de la Comunidad Autónoma.

No había relación de ingresos, existían contratos no registrados, y las cuentas no mostraban una "imagen fiel" de la realidad de la Sociedad, cuenta la auditoría, según el Gobierno.

Como "detalle", Serna se ha referido a un concierto de Estopa organizado por esta entidad dentro de los actos del Año Santo y en el que el 54% de las entradas se repartió de forma gratuita.

A la existencia de la Sociedad se sumaba la de una asociación similar, que en 2010 recibió 390.000 euros, y que fue creada en 1999 en lo que para Serna es un ejemplo de la "duplicidad" de funciones que el gabinete de Diego quiere evitar.

"Esto va a cambiar. Nosotros adelgazaremos la Administración", ha aseverado el consejero, que ha puesto como ejemplo el cese del director general de esta sociedad, cuyas funciones, junto a las del director general de la Sociedad Regional de Cultura y Deporte y el del Consorcio de Museos, asumirá el nuevo director de la Sociedad Regional de Cultura, cuyo sueldo además baja hasta los 45.000 euros.