Las obras de derribo de la nave han comenzado hoy
TORRELAVEGA, 13 Jun. (EUROPA PRESS) -
El Ayuntamiento de Torrelavega ha comenzado este miércoles a acometer las obras de derribo de la nave de la organización solidaria Traperos de Emaus, situada en un solar de propiedad municipal de la calle Pablo Garnica, que constituye una antigua demanda vecinal porque se estaba convirtiendo en un lugar "muy abandonado" y en "un gran foco de suciedad".
El alcalde, Ildefonso Calderón, que ha asistido al comienzo de las obras de derribo del antiguo local de Traperos de Emaus, ha explicado que tres son los propósitos que persigue el Consistorio con esta actuación: eliminar un "embudo" de la ciudad (estrechez de la vía) con el retranqueo de la instalación lo que permitirá también ampliar las aceras; dedicar el resto del espacio a zona de ocio para el barrio Paseo del Niño; y ampliar las instalaciones del Hogar del Transeúnte.
El comienzo de este derribo ha contado con la presencia del alcalde de Torrelavega, Ildefonso Calderón; los concejales de Obras, Alejandro Fernández Berjano, y de Barrios y Pueblos, Francisco Trueba, técnicos y operarios del ayuntamiento de Torrelavega.
El regidor ha explicado que esta actuación se empezó a preparar hace algunas semanas cuando se vació de la nave siete camiones de basura.
Ha indicado que esta actuación se ha demorado algo en el tiempo debido a que se trata de un derribo complejo porque el fibrocemento o también conocida como uralita, que contiene amianto, del que está hecha la tejabana de la nave requiere para su eliminación y manipulación de unos permisos muy exigentes para garantizar la seguridad de los operarios que realizan estas labores. "Ha sido necesario cumplir la normativa para la retirada de la uralita".
El alcalde ha asegurado que debido al carácter nocivo del amianto para la salud es preciso cumplir unas exigencias muy estrictas que en España realizan muy pocas empresas y para esta actuación, que asciende a 11.000 euros, se requiere incluso, ha subrayado el alcalde, un proyecto de Industria y varias licencias que hemos tenido que conseguir.
Tras la retirada del fibrocemento se demolerán los 300 metros cuadrados de nave y se retrancará la instalación para ampliar la acera. Se trata de unificar la anchura de esta calle que en este punto se estrechaba, con lo que conseguimos eliminar un tapón histórico, ha destacado el regidor municipal.
La nave, ha recordado el alcalde, fue cedida a Traperos de Emaus para su utilización como rastrillo. Se ubica en un solar de 2.000 metros cuadrados donde comparte espacio con el Hogar del Transeúnte y unos talleres.
