Mediavilla afirma que los "ataques" de representantes democráticos al Alto Tribunal constituyen una "presión irresponsable e inadmisible"
SANTANDER, 24 May. (EUROPA PRESS) -
El consejero de Presidencia y Justicia del Gobierno cántabro, Vicente Mediavilla, solicitó hoy la "renovación urgente" del Tribunal Constitucional, pero al mismo tiempo defendió su "plena legitimidad" para dictar sentencia sobre la modificación del Estatuto de Autonomía de Cataluña.
Estos dos argumentos centraron la intervención del consejero cántabro en la Comisión General de Comunidades Autónomas del Senado que se celebra hoy, convocada tras la petición del presidente catalán, José Montilla, para exigir la renovación de los cuatro magistrados del TC nombrados por esta Cámara.
Según informó el Gobierno cántabro, Mediavilla se dirigió directamente a Montilla para hacerle saber que "en ningún caso cuente con Cantabria apara apuntar siquiera una merma en la legitimidad del Tribunal Constitucional" para resolver los recursos de inconstitucionalidad sobre la modificación del Estatut.
El titular de Justicia señaló que, en los últimos meses, "parece haberse olvidado que cuando hablamos del Tribunal Constitucional hablamos de la Constitución en sí misma, del esqueleto sobre el que hemos ido forjando el cuerpo de nuestra democracia".
En este sentido, recordó algunas declaraciones públicas realizadas por Montilla, quien, entre otras cuestiones, ha afirmado que el TC es un "órgano cuestionado o y cuestionable" y ha advertido que "si se toca el Estatut algo grave pasará".
Para Mediavilla, estas aseveraciones son "ataques frontales a la legitimidad del Alto Tribunal y constituyen una presión irresponsable e inadmisible para los magistrados que ostentan la función de interpretar" la Constitución, máxime, cuando quien las realiza son los propios representantes de las instituciones democráticas.
RENOVACIÓN URGENTE
Por otro lado, Mediavilla afirmó que Cantabria, una región orgullosa de sus particularidades y "defensora a ultranza" del Estado autonómico como forma de organización territorial del Estado, ve en la reforma del TC de 2007 "un refuerzo del Estado de las Autonomías", ya que fue esta modificación la que posibilitó que las comunidades autónomas propusiesen dos magistrados a la Cámara.
Cantabria así lo hizo, tal y como recordó el consejero, "por unanimidad total de todos sus diputados". Así, en septiembre de 2008 el presidente del Parlamento de Cantabria leyó el acuerdo por el que se proponía a Luis Martín Rebollo y Enrique López.
Con todo, Mediavilla defendió que pese a que la situación de interinidad del Constitucional "no es conveniente para un órgano en el que recae la potestad de interpretar" nuestra Norma Suprema, es la propia Ley Orgánica que regula el TC la que recoge que "los magistrados continuarán en el ejercicio de sus funciones hasta que hayan tomado posesión quienes hubieren de sucederles", y no contempla ceses automáticos ni ningún otro mecanismo.
Por ello, el consejero respaldó la legitimidad del TC y abogó por que su renovación se aborde "con prudencia, con acuerdos, con tranquilidad y con el mayor consenso posible". "La renovación no puede hacerse pensando en la solución de un caso concreto, sino con un carácter de generalidad y, en todo caso, para preservar el interés público", señaló.
Por último, se refirió al manifiesto suscrito por 62 articulistas de prensa catalana en el que advierten de que la sentencia del Tribunal Constitucional sobre el texto autonómico hará elegir a los catalanes "entre la involución y la secesión". Así, Mediavilla afirmó que "a quienes han planteado esa duda, hay que despejársela aplicándoles con todo el rigor la Constitución Española".
