Gorostiaga dice que son los "únicos" presupuestos posibles en este momento y contribuirán a salir de la crisis "antes y mejor"
SANTANDER, 28 Oct. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno de Cantabria tendrá el próximo año un presupuesto de 2.395 millones de euros que, una vez descontada la deuda y otros gastos financieros, deja a las consejerías una capacidad real de gasto de unos 2.160 millones, en los niveles de 2007, el año que más creció la economía de la región. Será el segundo presupuesto consecutivo en el que los gastos bajan, pero los ciudadanos "no van a notar" ese descenso en su bienestar, porque se mantiene la apuesta por las políticas sociales.
Se trata de unas cuentas elaboradas "desde la responsabilidad y la austeridad", y "pensadas" para salir de la crisis "antes y mejor" que otras comunidades autónomas, para consolidar la "recuperación que parece vislumbrarse" y para mantener la "cohesión" social y territorial.
Así lo han afirmado la vicepresidenta cántabra, Dolores Gorostiaga, y el consejero de Economía y Hacienda, Ángel Agudo, al presentar en rueda de prensa, junto al director general de Presupuestos, Manuel Díaz, el proyecto de ley, aprobado este jueves en el Consejo de Gobierno y que ahora empezará su tramitación parlamentaria.
En palabras de Gorostiaga, el de 2011 es el presupuesto "más difícil" de los realizados hasta ahora, pero sobre todo, ha hecho hincapié en que es el presupuesto que "necesita" Cantabria y "el único" que puede hacerse en este momento. Por eso, espera que "por primera vez", este año la oposición asuma la necesidad de hacer "un ejercicio de responsabilidad" para apoyar estas cuentas y mejorarlas "si puede", por el bien de los cántabros.
La vicepresidenta ha señalado que el Gobierno tendrá en 2011 menos capacidad de inversión y de gasto porque "así lo determinan las circunstancias" y, por tanto, la principal característica de este presupuesto "no es cuánto se gasta, sino en qué".
Según ha explicado, el Ejecutivo ha tenido que "priorizar", ha marcado unas líneas que "bajo ningún concepto" se pueden pasar y ha señalado políticas que son "intocables" y, en consecuencia, quedan "totalmente protegidas" pese al descenso presupuestario.
Son, en esencia, las políticas que garantizan la cohesión social y, de hecho, tres de cada cuatro euros del presupuesto se destinan a este ámbito de actuación en el que se integran la sanidad, la educación o los servicios sociales.
Es más, el "único" programa de gasto que subirá en 2011 su consignación presupuestaria se inscribe en el gasto social: el de aplicación de la ley de dependencia, cuyo presupuesto crecerá en torno al 10 por ciento, hasta alcanzar 144 millones de euros para garantizar la atención de unas 20.000 personas.
CONSOLIDAR EL CRECIMIENTO
Junto a la apuesta social, otra de las características de estos presupuestos es que están "pensados para que las necesidades de hoy, no pongan en riesgo las necesidades del futuro" y, por eso, están marcados por el "control" del déficit y el "bajo" endeudamiento.
Además, se orientan a la "consolidación" del crecimiento "tímido" observado ya en el segundo trimestre del año, apostando para ello por inversiones estratégicas, sobre todo en infraestructuras orientadas al I+D+i.
Gorostiaga ha resaltado que este presupuesto "profundiza en la apuesta" por crecer de una manera diferente para tener así un crecimiento "más fuerte y estable", basado en el conocimiento, el I+D+i y las energías renovables, que genere empleo de calidad. Prueba de esa apuesta es que las transferencias a la Universidad crecerán un 6 por ciento en 2011.
CIFRAS DE GASTO
El presupuesto de gastos de 2011 ascienden a 2.395 millones de euros, lo que supone un descenso del 2,5 por ciento con respecto a las cifras de 2010 (2.457). No obstante, si se descuentan los gastos financieros (que incluyen las amortizaciones de deuda y ampliaciones de capital), la cifra se sitúa en 2.234 millones, un 6,7 por ciento menos.
Esa cifra constituye el denominado gasto no financiero, el gasto efectivo que pueden realizar las consejerías, aunque también incluye los intereses de la deuda, que en 2011 supondrán más de 74 millones de euros, un 69,2 por ciento más que este año, debido tanto al aumento que ha sufrido la deuda total de la Comunidad Autónoma este año, como al encarecimiento de los intereses.
Si se analiza la distribución de esos gastos no financieros, se observa que el 74 por ciento (1.655 millones de euros) se destinan al área social del presupuesto, en el que se incluyen aportaciones como las destinadas a la sanidad, la educación, los servicios, sociales, el fomento del empleo, el acceso a la vivienda, la justicia o la protección civil.
Este apartado se recorta un 6,4% comparado con el presupuesto de 2010. Por su parte, el área de promoción económica se reduce un 14,4%, hasta 445 millones, destinados a actuaciones vinculadas al sector primario, la industria, el turismo, las infraestructuras o el I+D+i, entre otras.
Por departamentos, el Servicio Cántabro de Salud se lleva el 30% del presupuesto regional (más de 701 millones de euros). A continuación se sitúan la Consejería de Educación (513,5 millones), el Instituto Cántabro de Servicios Sociales (196,7), la Consejería de Medio Ambiente (más de 139 millones), Obras Públicas, Ordenación del Territorio, Vivienda y Urbanismo (121) y Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca y Biodiversidad (102,6 millones).
LAS INVERSIONES CAEN UN 16,1%
Por capítulos, las principales caídas en 2011 se registran en los capítulos inversores, el VI y el VII (inversiones reales y transferencias de capital), que bajan un 16,1% y un 22,4%, respectivamente, hasta situarse en casi 253 millones de inversiones y algo más de 136 millones de transferencias de capital.
Mientras tanto, los gastos de personal se reducen un 6,7 por ciento y los gastos corrientes un 2,2 por ciento, un porcentaje que, aunque pueda parecer bajo, el consejero ha matizado, ya que no hay que olvidar que en los gastos corrientes se incluyen partidas como las destinadas al transporte escolar, el suministro de prótesis o las encomiendas a MARE para la gestión de los residuos y el agua.
Además, Agudo ha recalcado que los gastos relativos a dietas, kilometrajes, propaganda y publicidad descienden por encima del 20 por ciento (con un ahorro de unos 2 millones de euros), en contraposición con lo sucedido en el último presupuesto del Gobierno del PP (2003), cuando algunos de estos gastos crecieron "más de un cien por cien".
INGRESOS
Mientras los gastos no financieros de 2011 alcanzan los 2.234 millones de euros, los ingresos no financieros, en cambio, sólo llegan a 2.029 millones. Esto supone un desfase de 205 millones de euros, en el que se incluyen los 25 millones que habrá que devolver al Estado por la liquidación de los anticipos a cuenta de 2008 y 180 millones de euros de déficit. Para cubrir ese desajuste entre los ingresos y los gastos la Comunidad Autónoma recurrirá a nuevo endeudamiento.
El consejero ha explicado que los ingresos no financieros crecerán un 0,3 por ciento en 2011. Aumentarán en buena medida los ingresos procedentes de algunos impuestos como el IRPF, un dato que se explica, según Agudo, por los cambios en el modelo de financiación autonómica, que aporta más recursos vía impuestos (por la mayor participación de la comunidad en ellos) y menos por transferencias corrientes.
Y a esto se une la reforma fiscal cántabra, que en palabras de la vicepresidenta, es una reforma "limitada, contenida, progresiva, justa y equitativa", que "afectará levemente a las rentas más altas" y no va a afectar ni al crecimiento económico, ni al dinamismo ni a la capacidad de consumo.
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