SANTANDER, 16 May. (EUROPA PRESS) -
El presidente regional, Ignacio Diego, ha mostrado su confianza en los gestores de Caja Cantabria tras su integración en Liberbank, y ha asegurado que en el Gobierno están siendo "tremendamente respetuosos" con su labor.
Además, considera que ante la posible fusión del banco (del que también forman parte Caja Extremadura y Cajastur) con otros grupos financieros las gestiones deben llevarse a cabo "con discreción" y trabajando dentro del ámbito de las propias entidades, para que "culminen con éxito".
Diego ha respondido así este miércoles, durante la inauguración del salón de la empresa pyme y comercio (SEPCO), a preguntas de los periodistas sobre si le preocupa la situación de la Caja ante la nueva fusión.
"Liberbank y Caja Cantabria tienen sus gestores y yo quiero poner confianza en los gestores que rigen los destinos de la Caja dentro de Liberbank", ha respondido.
Tras recordar que con los gobiernos de José Luis Rodríguez Zapatero en España y Miguel Ángel Revilla en la Comunidad Caja Cantabria desapareció como entidad financiera "después de ciento y pico de años" y se integró "en un gran bloque" en el que "pierde entidad, capacidad de decisión y autonomía", Diego ha señalado que en el Ejecutivo del PP están siendo "tremendamente respetuosos" y se limitan a cumplir una función de "supervisión".
Una supervisión "prudente y distante, pero constante" que van a seguir haciendo para garantizar el "bien hacer" de la entidad en relación con las empresas e inversores. También plantearán "algunas advertencias", como las que ya han hecho tanto a Caja Cantabria como ahora a Liberbank.
Se ha referido así el presidente regional al "recorte" de préstamos a los empresarios cántabros y las condiciones de los mismos. "Hemos hecho notar este hecho a Liberbank y así vamos a seguir actuando", ha advertido Diego, para añadir que se hará desde el "respeto" que el banco merece como entidad privada pero desde la "vigilancia" que permite la ley de Cajas a las comunidades autónomas.
