Empleados del restaurante de Puente San Miguel siguen esperando una solución tras meses sin cobrar ni noticias del jefe

Actualizado: lunes, 14 enero 2013 20:12

Siguen yendo a trabajar porque temen que si dejan de acudir a su trabajo pierdan sus derechos cuando se resuelva la situación


SANTANDER, 14 Ene. (EUROPA PRESS) -

Los nueve empleados del restaurante 'La Nueva Ermita' de Puente San Miguel, regentado por el hostelero Óscar Cordero, siguen esperando una solución tras llevar más de tres meses sin noticias de su jefe después de que, supuestamente, se marchara a México hasta Navidad; estar sin cobrar y tener el establecimiento sin luz ni provisiones.

A pesar de ello, y después de que la Inspección de Trabajo les ha informado de que no puede darles la baja de oficio, los trabajadores siguen yendo a trabajar porque temen que, de lo contrario, pierdan los derechos que les correspondan, en forma de pago o indemnizaciones, cuando la situación se resuelva en los tribunales.

"Es que de momento no hay otra salida", ha explicado a Europa Press Fernando Duro, el cocinero de 'La Nueva Ermita' y uno de los afectados por esta situación.

Esta situación comenzó para ellos --un cocinero, cuatro camareros, un persona de limpieza y tres ayudantes de cocina-- el pasado 10 de octubre cuando su jefe les comunicó que se iba a México y que regresaría para la Navidad, algo que no hizo.

Según ha detallado, antes de marcharse contrató a un abogado al que Cordero otorgó ciertos poderes durante su estancia en México, entre los que estaba, la capacidad para contratar o despedir personal o pagar las nóminas.

El cocinero ha explicado que, cuando les anunció su marcha, varios de los trabajadores pensaron que "no iba a volver" ya que conocían que tenía problemas y deudas de otros negocios --otro restaurante en Torrelavega, el 'Cienvinos'-- y de su propia casa, que, según han podido saber después, podrían superar, según los datos que han podido conocer a posteriori, los 700.000 euros.

Sus sospechas comenzaron a confirmarse cuando un mes después empezaron a embargar las cuentas de Cordero, se quedaron sin suministros y sin dinero para adquirirlos y su jefe no volvió para Navidad como les había dicho, con lo que se decidieron a denunciarlo.

Según lo relatado por el cocinero, su jefe se fue a México tras recaudar la caja hecha por el restaurante durante el verano y también en las fiestas del pueblo.

Aunque no han tenido ningún contacto con él, el cocinero cree que está trabajando en México, país que, antes de marcharse en octubre, había visitado unas semanas antes.

Tras meses en esta situación, Duro reconoce que de la plantilla ya hay gente "que lo está pasando mal" ya que llevan desde octubre sin cobrar.

Ahora, y mientras esperan una solución --el juicio está previsto que se celebre en abril-- se turnan para ir al hotel y trabajan allí de 10.00 a 18.00 horas.

De hecho, el cocinero señala que ahora que ha salido a la luz su situación van "más tiempo que antes a trabajar" porque tienen "miedo" a que una inspección de trabajo les pille con el restaurante sin trabajadores.