SANTANDER, 30 Jun. (EUROPA PRESS) -
El catedrático de Ecología de la Universidad de Alcalá de Henares, Antonio Gómez Sal, ha señalado que la sostenibilidad agraria implica "un gran compromiso ético y físico" con los ecosistemas y con su capacidad para sostener usos agrícolas.
Gómez Sal se pronunció así con motivo de su participación en el curso 'El futuro de la actividad agraria. Claves para su sostenibilidad', que dirige esta semana en Cabezón de la Sal, dentro de la actividad académica de verano de la Universidad de Cantabria (UC).
En su intervención, destacó que el desarrollo sostenible de la actividad agraria es "uno de los mayores retos" a los que se enfrenta la sociedad moderna, puesto que de ello depende la variedad y calidad de los alimentos destinados al consumo, explicó.
Asimismo, defendió la necesidad de contar con una visión "sistémica" del paisaje, que permita adaptar la actividad agraria a sus características.
Por otro lado se refirió a la soberanía alimentaria, concepto que, según dijo, representa la capacidad de desarrollo de los entornos para abastecerse de alimentos sin depender de las grandes estructuras del mercado.
Tras definir las relaciones básicas entre ecosistemas y explotaciones agrarias, Gómez Sal se refirió a una serie de desequilibrios derivados de una gestión "incorrecta" de los agrosistemas, algunos de los cuales "están teniendo serias consecuencias en distintos ámbitos de la actividad humana", advirtió.
Explicó en este sentido que, además de problemas medioambientales como el efecto invernadero o el cambio climático, se dan casos de excesiva acumulación de nitrógeno en la biosfera como consecuencia del "uso indiscriminado" de agroquímicos y pesticidas, que aumentan los niveles de contaminación y producen enfermedades por exposición a medio y largo plazo.
CURSO
Al curso también asisten científicos, profesores universitarios y de miembros del Centro de Investigaciones Energéticas, Medioambientales y Tecnológicas, entre otros.
El curso finalizará con un debate-coloquio en el que se abordarán las conclusiones alcanzadas a lo largo del mismo y en el que se propondrán posible soluciones a los principales problemas que debe afrontar el futuro de la actividad agrícola.
