El Festival abre sus puertas a cinco solistas que interpretan a Bach y Liszt junto a la Joven Orquesta Sinfónica

SANTANDER 12 Ago. (EUROPA PRESS) -

El Festival Internacional de Santander (FIS) abre sus puertas a cinco jóvenes solistas cántabros, que interpretarán obras de Bach, Liszt, Beethoven o Schumann junto a la Joven Orquesta Sinfónica de Cantabria (Joscan).

El debut de estos músicos en el FIS se enmarca dentro del ciclo Jóvenes Intérpretes, y tendrá lugar en dos conciertos, que se desarrollarán el martes, 13 de agosto, en la Sala Pereda del Palacio de Festivales, a partir de las 20.30 horas, y el viernes, día 16, en el mismo lugar y a la misma hora.

En la primera sesión intervendrán el violinista Daniel García y el pianista Hugo Selles, ambos de Santander, con piezas de Bach, Liszt o Jesús de Monasterio, mientras que Beethoven o Shumann serán los protagonistas del segundo recital, que correrá a cargo del pianista madrileño Omar-Jonatás Sánchez y la violonchelista santanderina Lidia Alonso.

El objetivo de esta iniciativa, en la que también intervendrá el pianista ovetense Ernesto Garrido, es combinar "nombres consagrados" de la música con otros que se van a consagrar en el futuro, como ha apuntado el director del FIS, Jaime Martín.

En una rueda de prensa ofrecida en la Sala Pereda, y en la que ha estado acompañado por cuatro de los cinco protagonistas del doble recital, Martín ha resaltado la oportunidad que se brinda, con iniciativas como ésta, a jóvenes intérpretes para que, ahora que están empezando su carrera se puedan abrir puertas y caminos de cara al futuro.

Los cinco músicos, que fueron aspirantes a solista de la Joven Orquesta Sinfónica, han agradecido esta oportunidad, que no consideran un "premio de consolación", y han mostrado su "ilusión" por actuar "en casa", en el Festival de Santander. Se trata, como han reconocido, de un "honor", además de un "regalo", ya que en la actualidad es "bastante difícil hacerse un hueco" en la música.

Por ello, creen que es un "acierto" dar oportunidades a jóvenes músicos, para que muestren su "fuerza" y "calidad" en público, más en certámenes del "prestigio" del FIS, que este año cumple su 62 edición.

Y aunque al actuar "siempre" surgen "nervios" e implica "un riesgo", los cinco jóvenes intérpretes han escogido obras con las que ya han trabajado y se sienten "familiarizados", en vez de optar por "arriesgar".

En este sentido, el director del FIS ha puntualizado que aunque de cara al concierto les dio "carta blanca" para que eligieran las piezas que desearan, les puso como "única condición" el público, que se "acordaran" de él y lo tuvieran "en mente".

También tendrán en cuenta, tras su actuación, la crítica, aunque antes de actuar, y como han reconocido, no sienten una "presión extra".

En el primer concierto interpretarán la Sonata para violín n.1 BWV1001 de Bach, Poème Op.25 de Chausson, introduction et Rondo Capriccioso Op.28 para violín y piano de Saint-Saëns, Vallée d'Obermann de Liszt, Adiós a la Alhambra para violín y piano de Jesús de Monasterio y Sonata n.1 en fa menor Op.1 de Prokofiev.