El Gobierno vasco expresa su rechazo "total" a la política sobre la anchoa del MAPA, que no se entera "de la fiesta"

Actualizado: viernes, 23 junio 2006 16:41

Todas las CC.AA. afectadas piden el cierre del caladero porque los informes apuntan a que se está por debajo de las 28.000 toneladas

SANTANDER, 23 Jun. (EUROPA PRESS) -

El viceconsejero de Pesca del Gobierno vasco, Luis Miguel Macías, ha expresado hoy su rechazo "total" a la política que sobre el caladero de la anchoa viene realizando el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA), cuyos dirigentes tienen "que empezar a enterarse de la fiesta".

Así lo expresó el viceconsejero vasco, a los medios de comunicación, en un intermedio de la reunión que mantuvieron en Santander entre el director general de Estructuras y Mercados Pesqueros, Alberto López, con representantes de Pesca de Cantabria, Asturias, Galicia y País Vasco, quienes pidieron por unanimidad el cierre del caladero dado que los informes científicos, que se harán oficiales antes del 30 de junio, apuntan a que se está por debajo de las 28.000 toneladas de capturas, límite marcado para solicitar a la Comisión Europea una nueva parada.

Frente a la tesis de López, de que "el componente de las capturas no es un elemento único" en la merma de la anchoa, -frente a otras de tipo medioambiental o de confluencia con otras especies, como la sardina-, el representante vasco negó posteriormente esta teoría, ya que "decir que la mortalidad por pesca tiene una incidencia menor y que todo esto se debe a factores medioambientales" supone que el Ministerio no ha "entendido nada".

"Hay que rectificar todo lo que se ha hecho para que en el futuro no se tenga que reproducir este tipo de problemas", aseguró Macías, tras resaltar que "hay que recordar por enésima vez que la mortalidad por pesca juega un papel entre un 40 y un 50 por ciento de la mortalidad total de la pesquería".

"El Gobierno vasco estaba diciendo hasta ahora lo contrario que el Ministerio en los últimos años, y como al final lo que se ha hecho es lo que decía el Ministerio y no lo que decía el Gobierno vasco, estamos donde estamos", aseguró Macías, añadiendo que "a mí lo que me preocupa es que el Ministerio hoy siga expresándose en esos mismos términos".

"CUENTA ATRÁS" DEL CIERRE

El viceconsejero de Pesca vasco aseguró que se está "en la cuenta atrás para el cierre de la pesquería", preveyendo que se dicte esta medida "en el mes de julio", lo que "va a ser posible gracias al informe científico del Gobierno vasco", que pedirá también al Ministerio y al resto de comunidades autónomas afectadas la "necesidad" de llevar a cabo un trabajo que posiblemente duraría "más de cuatro años" que afronte la especie de la anchoa de manera "más integral" y desde un punto de vista más "ecológico" que los actuales estudios.

Por su parte, el director de Pesca de Cantabria, Fernando Torrontegui, aseguró que tal y como se ha transmitido, todo parece indicar que la biomasa de la anchoa está "muy por debajo" de las 28.000 toneladas, con lo que, de confirmarse, "esperamos que se cumpla lo que se ha quedado" y "se cierre la costera".

Respecto a la posible adopción de un sistema de ayudas, Torrontegui indicó que "el Gobierno de Cantabria va a ayudar al sector en la medida que sea".

A este respecto, el director general de Estructuras y Mercados Pesqueros aseguró que en el caso de que se decidan articular ayudas, se deberá de establecer un mecanismo de "iniciativas de apoyo" a "corto y medio plazo", paralelamente al establecimiento de "una modulación a través de paradas temporales" y "al establecimiento de unas medidas de salvamento y de rescate de empresas".

DE UN 25 A UN 40% DE INGRESOS AL SECTOR

López explicó que el peso económico de la anchoa, con una costera de dos meses y medio, en el sector oscila entre "el 25 y el 40" por ciento como máximo de los ingresos anuales.

Por último y para reafirmar la tesis del Ministerio de que el componente de las capturas no es un elemento único en la merma de la especie, López afirmó que así también lo confirma el dictamen de octubre de 2005 del ICEX, cuando "dijo que la mortalidad por pesca era aceptable".