SANTANDER, 29 Oct. (EUROPA PRESS) -
La vicepresidenta cántabra y consejera de Empleo y Bienestar Social, Lola Gorostiaga, no cree que en España haya millón y medio de parados que no quieren trabajar y piensa que las razones de ese paro estructural requieren un análisis "pormenorizado", porque las situaciones son "muy variopintas".
De esta forma, la vicepresidenta regional y líder de los socialistas cántabros respondió hoy a preguntas de los periodistas a propósito de las afirmaciones del presidente cántabro, el regionalista Miguel Ángel Revilla, sobre el paro estructural en España.
Gorostiaga reconoció que es cierto que en nuestro país, incluso en etapas de pleno empleo, hay un paro estructural de alrededor del 5 por ciento, "que está ahí", pero no cree que sea porque los parados "no quieren trabajar".
"Creo que a todo mundo que le ofrecen la posibilidad de trabajar, lo hace", aseveró la vicepresidenta, aunque también reconoció que "hay muchos rechazos" de personas a las que se ofrecen cursos de formación desde las oficinas de empleo o trabajos y presentan certificados de que no pueden "por distintas circunstancias".
Según dijo, el mercado de trabajo es "muy complicado" y los inscritos en las oficinas de empleo están por "muy diversas" razones. Así, destacó que hay personas que están en el paro porque han perdido el empleo o incluso otros que se inscriben porque es condición para la obtención de ayudas o para acogerse a determinadas convocatorias, subvenciones, bonificaciones, etcétera.
"Aquí, para cualquier cosa, se le exige a la gente el certificado de desempleo. Y hay oleadas, está demostrado", apostilló Gorostiaga, quien matizó no obstante que esta última razón es una "anécdota".
"Lo que está claro es que este país tiene una tasa importantísima de paro estructural y no sé si nunca nos hemos puesto realmente a analizar cuál es la circunstancia de que esté ahí. Y es muy variopinta, no se refiere a un perfil determinado. Es de todas las edades y sexos", agregó. Y a su juicio, eso necesita de un estudio "mucho más pormenorizado caso por caso" para ver a qué corresponde y definir los itinerarios de formación.
Preguntada por el caso de subsidios como el PER, recalcó que eso no es paro estructural, sino empleo intermitente, lo mismo que ocurre por ejemplo en algunos sectores cántabros como el conservero, para el que el Gobierno regional está estudiando medidas.
Por último, sobre la posibilidad de que declaraciones como las de Revilla alienten posturas como la del 'decretazo' del PP, Gorostiaga dejó claro que al Partido Popular "no hace falta que le anime nadie" y lo demostró en una crisis con una incidencia mucho menor en la que "donde primero metió mano" fue en los derechos de los trabajadores.
Según dijo, para el PP el recorte de derechos de los trabajadores y de servicios públicos es "su vocación" y animó a analizar el gasto social en las distintas comunidades autónomas en el momento actual de crisis, porque es donde se ve "perfectamente la ideología que se aplica al gasto público".
