El obispo de Santander retoma con normalidad su actividad tras ser ingresado este jueves por una bajada de tensión

El obispo de Santander, Vicente Jiménez Zamora
OBISPADO
Actualizado: viernes, 24 agosto 2012 13:45

Mientras se encontraba peregrinando con fieles en Liébana


SANTANDER, 24 Ago. (EUROPA PRESS) -

El obispo de Santander, monseñor Vicente Jiménez Zamora, ha retomado este viernes, con "toda normalidad", su agenda de trabajo en la sede episcopal, después de sufrir, hacia el mediodía de ayer, una caída de tensión que ocasionó que fuera ingresado en el Hospital Valdecilla de Santander, donde recibió el alta médica a última hora de la tarde.

Monseñor Jiménez ha agradecido este viernes las muestras de cariño que ha recibido de la curia, clero diocesano, religiosos y de compañeros, así como de fieles de la Iglesia cántabra y de Mena. Entre las personas que se han interesado por su salud, el Obispado destaca al presidente del Gobierno cántabro, Ignacio Diego.

El obispo sufrió este jueves una caída de tensión poco antes de celebrar la Misa del peregrino en el Monasterio de Santo Toribio de Liébana, al que acudió en autobús formando parte de una peregrinación de fieles.

Debido al calor, que en la comarca de Liébana es más acusado en verano por su altitud y microclima, Jiménez se sintió indispuesto poco antes de iniciarse la misa del mediodía en el monasterio lebaniego.

En este templo medieval se está celebrando un período jubilar extraordinario con motivo de la conmemoración del 500 aniversario de la Bula Papal que posibilitó la convocatoria de Años santos en este centro espiritual, enclavado en las estribaciones de los Picos de Europa.

TRASLADO AL HOSPITAL VALDECILLA

Tras sentirse indispuesto, Jiménez fue conducido al cercano centro de salud de Potes y, con posterioridad, trasladado en el helicóptero del Servicio de Urgencias del 112, hasta el Hospital Valdecilla de Santander.

En el centro hospitalario fue reconocido y después de permanecer durante varias horas en observación y reposo, fue dado de alta a última hora de la tarde de este jueves, ya que todas las constantes vitales eran "completamente normales", según relata el Obispado en un comunicado de prensa. En la mañana de este viernes ha permanecido trabajando con normalidad en su despacho de la sede del Obispado de Santander.