El PP exige a Revilla que salga del "escondite" para hablar del "escándalo" de GFB, donde se han enterrado 55 millones

Le señala como "único responsable" del "fracaso más sonado" del Gobierno regional

La diputada del PP de Cantabria María Antonia Cortabitarte
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Europa Press Cantabria
Actualizado: viernes, 8 abril 2011 16:43

SANTANDER, 8 Abr. (EUROPA PRESS) -

La diputada regional del PP María Antonia Cortabitarte ha exigido este viernes al presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, que antes de las elecciones salga del "escondite donde está metido para hablar de GFB", un asunto en el que, según las últimas estimaciones de los 'populares', se han "enterrado" 55 millones de euros de dinero público.

En una rueda de prensa, Cortabitarte ha opinado que la participación del Gobierno regional en GFB no ha sido un "error", sino una "temeridad" de la que Revilla --a su juicio "único responsable" del "escándalo político más bochornoso" que se ha vivido en Cantabria-- lleva "un año desaparecido" y un tema del que "ya nadie le oye hablar".

Según ha señalado, lo que iba a ser el "proyecto estrella" del Gobierno regional, se ha convertido, según la 'popular', en su "fracaso más sonado", una fábrica que, según la Administración concursal --a la que ha citado Cortabitarte--, ha generado unas "deudas" de 67 millones de euros y a la que le faltan "al menos" 15 ó 16 millones" para poder entrar a funcionar.

Por este motivo, ha exigido al presidente regional que "ahora asuma el fracaso" de lo que "antes se quería atribuir como un éxito". Ha asegurado que, para Revilla, las siglas GFB se han convertido ahora en un "auténtico calvario".

La diputada del PP se ha preguntado "qué tiene que decir Revilla" una vez que un consejero de su Gobierno, concretamente el de Industria, Juan José Sota (PSOE), "por fin reconoció que fue un error" que el Gobierno se implicase en este proyecto empresarial.

Ha criticado que el Gobierno regional haya tardado "siete años" en darse cuenta de que los técnicos de Sodercan que desaconsejaron la participación del Ejecutivo en GFB "tenían razón" y ha considerado "inaudito" que no haya habido "una sola persona" que haya dimitido por este asunto.

"ESTAFA PARA LOS CÁNTABROS"

A juicio de Cortabitarte, las declaraciones de Sota reconocen que GFB ha sido una "estafa para los cántabros". "El dinero perdido es imperdonable", ha dicho la diputada.

En su opinión, el Gobierno ha estado "engañando" sobre GFB durante "más de cuatro años" en los que Revilla ha negado una y mil veces" que allí pasara algo.

La diputada del PP ha criticado, por otra parte, la postura del consejero de Economía, Ángel Agudo, que es, según ha dicho, "el cocinero del GFB", por "contradecir" a Sota y mantener que el proyecto es "viable" y que la "inversión está ahí".

"Sabe todo lo que ha pasado en GFB", ha señalado Cortabitarte, quien ha afirmado que en Orejo sólo hay "una fábrica fantasma", "una maquinaria inacabada", 77 trabajadores "despedidos y sin cobrar" y un proyecto en concurso de acreedores con 67 millones de euros en deudas.

"Todavía el consejero de Economía tiene el rostro de decir que ahí esta la inversión cuando el Gobierno no va a cobrar allí un duro", ha señalado Cortabitarte.

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