Sanidad ha realizado 400 inspecciones y abierto 19 expedientes desde la entrada en vigor de la Ley Antitabaco

Actualizado: martes, 29 agosto 2006 15:13

En dos años unos 1.500 cántabros han dejado de fumar y la tasa de fumadores ha bajado al 34,7%

SANTANDER, 29 Ago. (EUROPA PRESS) -

La Consejería de Sanidad y Servicios Sociales del Gobierno cántabro ha realizado más de 400 inspecciones en los ocho meses que lleva en vigor la Ley de medidas sanitarias frente al tabaquismo. De ellas, 46 se desarrollaron a raíz de denuncias recibidas en el departamento y 19 llevaron a la apertura de expedientes sancionadores. Los incumplimientos más frecuentes han sido por permitir fumar en espacios prohibidos, por tener máquinas expendedoras de tabaco en establecimientos no autorizados o por no estar visibles los carteles informativos sobre la autorización o no de fumar en el local.

En cualquier caso, el director general de Salud Pública, Santiago Rodríguez, hizo hoy un balance "altamente positivo" de la aplicación hasta la fecha de la ley que, según dijo, ha tenido una "buena aceptación", en contra de las "dudas" que generó en un primer momento "en algunos sectores". Para resolver esas dudas se han realizado reuniones con los distintos sectores afectados y buscado fórmulas de colaboración para el cumplimiento.

Hasta ahora la norma se ha "implantado con normalidad" y el próximo paso lo marca el 1 de septiembre, fecha a partir de la cual, los locales de hostelería, salas de fiestas, discotecas y otros centros deberán tener ya totalmente adecuadas sus instalaciones.

El Gobierno cántabro ha subvencionado en algunos casos los trabajos. En concreto, ocho establecimientos han recibido subvenciones por importe global de 88.500 euros en el marco de la convocatoria de la Consejería de Cultura, Turismo y Deporte para inversiones turísticas. De cara al próximo año, habrá una nueva convocatoria a la que también podrán acogerse obras de adecuación de los locales a la normativa antitabaco.

El mes de septiembre, además de implicar la exigencia de tener ya los locales adecuados, marcará también un cambio en la actividad inspectora de la Consejería. Por ahora, Sanidad ha centrado sus inspecciones principalmente en una faceta informativa, para exponer a los afectados los requisitos que marca la ley e intentar facilitarles su cumplimiento.

Después de ocho meses apostando por esta tarea, a partir de septiembre, aunque se mantendrá la labor informativa, que siempre acompañará a las inspecciones, se pasará también a la vía ejecutiva, para garantizar los derechos que reconoce la ley. "Queremos que se cumpla la ley y por tanto actuaremos para que todo el sector cumpla la norma. No nos podemos quedar en hablar de obligaciones, sino defender derechos", indicó Rodríguez al respecto.

1.500 FUMADORES MENOS EN DOS AÑOS

El director general resaltó que la ley ha contribuido a la protección de la salud frente a la principal causa de muerte evitable y ha "reforzado" la actitud creciente de percepción del riesgo. Además, ha completado las medidas que ya se habían puesto en Cantabria desde el año 2003 a través del Plan contra el tabaquismo.

Cuando la Consejería puso en marcha ese plan en el año 2003, la población fumadora en Cantabria representaba el 35,9%. Dos años después, en la encuesta realizada en 2005, el porcentaje ha bajado al 34,7% lo que, en términos absolutos, equivale a unos 1.500 fumadores menos, según indicó Santiago Rodríguez.

Junto a ello, ha aumentado el número de ex fumadores que llevan al menos un año sin fumar. Mientras en la encuesta de 2003 eran un 18,6%, dos años más tarde la cifra se ha elevado al 31,1%. La asignatura pendiente siguen siendo los más jóvenes, en los que no disminuye el ritmo de incorporación de nuevos fumadores.

2.000 PERSONAS HAN PEDIDO AYUDA

Por otro lado, más de 2.000 personas en Cantabria han solicitado a sus médicos de Atención Primaria ayuda para dejar de fumar, acogiéndose a la iniciativa de la Consejería que ofrece asistencia en Atención Primaria para ayudar a dejar el hábito de tabaco.

Esta labor se completa con la Unidad Especializada de Atención al Tabaquismo, que se puso en marcha en el mes de mayo y a la que serán remitidos aquellos pacientes que por su complejidad o patología de base no puedan dejar el tabaco con la ayuda de Atención Primaria. Actualmente las acciones se centran en determinar, junto con los médicos de familia, los criterios para derivar a esta unidad.

Finalmente, la Consejería también ha desarrollado otras actuaciones de deshabituación tabáquica entre colectivos modélicos y ha llegado así a más de 500 profesionales de la administración, el Parlamento, instituciones penitenciarias, educación, sanidad y de los medios de comunicación. En torno al 50% de los participantes siguen sin fumar un año después del programa.