SANTANDER, 23 Abr. (EUROPA PRESS) -
La Unesco decidirá a finales de junio o principios de julio si amplía la declaración de Patrimonio de la Humanidad que ya tiene la cueva de Altamira a otras 17 cuevas de la Cornisa Cantábrica que contienen también arte rupestre.
La Consejería de Cultura, Turismo y Deporte del Gobierno cántabro espera "con anhelo" esa decisión, que se tomará en una reunión que se celebrará probablemente en Quebec (Canadá), según explicó hoy el consejero, Francisco Javier López Marcano.
El consejero se reunió hoy con el prehistoriador Jean Clottes, que fue el encargado de visitar y evaluar las cuevas de la Cornisa Cantábrica incluidas en la candidatura con el fin de emitir su informe para la Unesco.
Clottes, que es un evaluador independiente, no puede pronunciarse sobre las posibilidades de la candidatura, pero lo que sí aseguró es que la Cornisa Cantábrica "es uno de los lugares mayores para el arte paleolítico en el mundo", algo que se debe en buena parte a su orografía y clima
Subrayó especialmente el ejemplo de Altamira, que ya es Patrimonio de la Humanidad, una cueva que consideró "importantísima y espectacular" y que tuvo un papel histórico esencial, porque fue donde el arte paleolítico fue "reconocido por primera vez".
Aunque Altamira es el principal exponente, hay más de un centenar de cuevas del Paleolítico en la Cornisa, entre ellas las 17 que optan a ser declaradas Patrimonio de la Humanidad. Esas 17 seleccionadas son de Cantabria (nueve), Asturias (cinco) y País Vasco (tres). Las cántabras son las cuatro cuevas del Monte Castillo (La Pasiega, El Castillo, Las Monedas y Las Chimeneas), junto con La Garma, El Pendo, Chufín, Hornos de la Peña y Covalanas.
La Unesco cerró en marzo el plazo para requerir en su caso nueva documentación que añadir a los expedientes de las distintas candidaturas a Patrimonio de la Humanidad --la del arte rupestre del Cantábrico es la única española en esta convocatoria-- y ahora sólo queda esperar a su decisión.
