TOLEDO, 4 Dic. (EUROPA PRESS) -
La Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG-IR) ha asegurado que el aumento del paro agrario en 4.360 personas registrado durante el pasado mes de noviembre en Castilla-La Mancha refleja la "crítica" situación del sector en la región, que cuenta con 14.466 desempleados.
Según ha informado la organización en nota de prensa, el paro registrado en noviembre equivale a un aumento del 43,14 por ciento del paro agrario respecto al mismo periodo de 2009, frente a un incremento medio del 11,56 por ciento en el conjunto de todos los sectores económicos en la región, según se desprende de los datos facilitados por el Servicio Público de Empleo.
El paro agrario, ha indicado, tiene una mayor importancia relativa en Castilla-La Mancha que en el conjunto del país, ya que, en el total nacional, los parados del sector agrario representan el 3,25 por ciento de los desempleados, mientras que Castilla-La Mancha duplica esa tasa con un 7,14 por ciento.
Para COAG-IR estos datos se pueden justificar con la crisis que atraviesa el sector y que "empuja" a los agricultores empleadores a reducir todo lo que pueden las labores realizadas por cuenta ajena y sustituirlas con trabajo propio, y también a que preparan sus explotaciones con objeto de que cada vez sea menos necesario recurrir a mano de obra externa.
Esta razón subyace, ha explicado, de las "evidentes mejoras" de la producción y de la gestión de la explotación, en muchas de las solicitudes de reestructuración de viñedos presentadas en la región que persiguen la mecanización de las labores de vendimia.
"Las políticas de la Unión Europea que han implantado medidas como el arranque de viñedo, los abandonos productivos y el desacoplamiento de las ayudas agrarias que conducen a una reducción de la actividad agraria y por tanto del nivel de empleo, son otros de los factores que influyen en el aumento del paro agrario", ha señalado COAG-IR.
SOLUCIÓN A LA SITUACIÓN
En opinión de la organización agraria esta situación podría solventarse si la agricultura y la ganadería se siguiera manteniendo como "motor de generación de empleo" en el medio rural, por lo que ha demandado a las administraciones políticas de empleo que contemplen las especiales características de las pequeñas y medianas explotaciones familiares y de los agricultores profesionales, que constituyen "el mayor nicho de empleo".
En este sentido, COAG-IR se ha referido al incremento del coste que ha supuesto para los agricultores el proceso de integración de los trabajadores por cuenta ajena en el Régimen General de la Seguridad Social, y el que puede suponer en un futuro la conclusión de este proceso con el proyecto de Ley en el que trabaja el Gobierno central.
"La caída del empleo agrario refuerza los argumentos de COAG-IR, que aboga por una futura Reforma de la PAC en la que se adopten medidas que mejoren la posición de los agricultores y ganaderos en el mercado y que les permita obtener por sus productos una remuneración superior a la de los costes de producción, además de que las ayudas vayan destinadas a los activos agrarios, que son los que mantienen el empleo en el sector", ha concluido la organización.
