TOLEDO, 17 Mar. (EUROPA PRESS)
El Consorcio de la Ciudad de Toledo, con la colaboración científica del Área de Historia Medieval de la Facultad de Humanidades de la Universidad de Castilla-La Mancha, va a ejecutar la segunda fase de las obras de mejora en la Mezquita del Cristo de la Luz de Toledo, el templo más antiguo de la ciudad, por importe de 811.327 euros, siendo el plazo de tiempo previsto de 24 meses.
Así lo anunció el presidente del Consorcio y alcalde de la ciudad, José Manuel Molina, que acompañado del arquitecto Francisco Jurado, que dirigirá la obra, de los arqueólogo Raúl Arribas y Arturo Ruiz Taboada, y del decano de la Facultad de Humanidades de Toledo, Ricardo Izquierdo, explicó en que van a consistir estas actuaciones.
El regidor toledano afirmó que la mezquita, que data del año 999, es un ejemplo de tolerancia pues mezcla un ábside cristiano que fue construido de forma posterior al templo árabe, "ejemplo visual de que nuestra ciudad respetó durante siglos las tres culturas".
Según recordó Molina, tras las primeras obras que consistieron en recuperar la cubierta plana del templo, ahora se pretende abordar los problemas de humedades de la Mezquita, provocadas por las corrientes de agua subterránea de la zona donde se ubica.
Para afrontar este problema se va a ejecutar una cámara bufa, solución que ya se ha puesto en practica en otros monumentos de la ciudad como es el caso de la sinagoga de Santa María la Blanca, actuación que irá precedida de un importante estudio arqueológico del subsuelo, y que contribuirá a conocer los orígenes de este monumento.
Molina que indicó que la mezquita permanecerá abierta, explicó que estas actuaciones se complementarán con la recuperación de la inscripción fundacional labrada en los ladrillos de la fachada principal de la mezquita, así como con la restauración de las bóvedas y las yeserías del inmueble.
El regidor toledano destacó la participación en el proyecto de los alumnos de la Facultad de Humanidades de Toledo que complementarán su formación académica con la realización de prácticas en el yacimiento, metodología con la que el Consorcio da un nuevo paso en su colaboración con la UCLM.
"El patrimonio es un elemento sustancial para enriquecer nuestra historia, es compatible con el desarrollo y la revitalización de una ciudad, y creo que las ciudades que no crecen son las que peor lo conservan" expresó Molina, quien aseveró sentirse muy orgulloso del trabajo realizado por el Consorcio.
Por su parte Ricardo Izquierdo agradeció al Consorcio el haber contado con la UCLM, y con la Facultad de Humanidades para acometer la supervisión científica de los trabajos arqueológicos que se van a realizar, así como la posibilidad de que los alumnos puedan realizar prácticas en la propia ciudad.