TOLEDO, 16 Abr. (EUROPA PRESS) -
Los representantes de las empresas de transportes más importantes de la provincia de Toledo anunciaron hoy que la huelga de transporte de viajeros por carretera comenzará a ser indefinida desde el próximo 26 de abril, una decisión que se ha tomado de forma unánime por parte de los 1.800 trabajadores afectados "que están dispuestos a llegar hasta donde haga falta y hasta que el cuerpo aguante" para conseguir sus pretensiones.
Así lo anunciaron en rueda de prensa los representantes en el comité de huelga de La Sepulvedana, Ángel Sereño; y de SAMAR, Ángel García, así como de las dos empresas que gestionan el transporte urbano en Toledo, Juan García de Unauto, y en Talavera de la Reina, Javier Juárez de Obrabus.
De este modo, Sereño explicó que en un principio se creó una plataforma de 17 puntos importantes a reivindicar ante la patronal de Transportes, "pero ante las negativas constantes" por parte de ésta, "hemos resumido nuestras reivindicaciones en lo que nos parece más importante, que es la subida de sueldo y que se nos contemple un plus por trabajar los domingos".
Con esto, expresó que se trata de "un pulso que ha querido echar la patronal, y que estamos seguro que van a perder". "Ellos no quisieron negociar y por eso hemos decidido ir a por todas", afirmó.
Explicó que el pasado viernes hubo una reunión entre representantes autorizados de la patronal "porque los propios directores gerentes no quieren dar la cara" y los representantes de los trabajadores, "pero seguimos igual". "Nos dicen que nos suben el salario, pero que se quedan con las subidas del IPC, y eso al final no es ninguna solución"", explicó.
Asimismo, todos los representantes de las empresas pidieron perdón públicamente a todos los usuarios afectados por la huelga de transportes, "pero tienen que tener en cuenta que estamos en nuestro derecho y que los más perjudicados, al fin y al cabo, somos nosotros que vamos a dejar de percibir nuestros salarios".
Por su parte, el representante de SAMAR alegó que la subida salarial "no es tanta como ellos dicen, si se tiene en cuenta la retribución que perciben los trabajadores de la misma empresa en Madrid, que sobrepasa incluso 300 euros a la nuestra", y resaltó la idea de que "ellos --refiriéndose a la patronal-- pueden subir lo que quieran los precios, lo que repercute en los viajeros, pero nosotros nos tenemos que quedar con los mismos salarios".
BOICOTEOS Y PRESIONES.
En este sentido, Juan García de Unauto señaló que la patronal también está intentando boicotear la huelga porque empresas como Rubicar "no están cumpliendo los servicios mínimos, y en muchos casos obligan a los trabajadores de Madrid a hacer turnos dobles sin los descansos correspondientes, poniendo en peligro la seguridad de los viajeros".
No obstante, aseguró que "nosotros estamos respetando los servicios mínimos en los días de huelga, y de hecho, no ha habido ningún incidente". Los servicios de transporte se acordaron en el funcionamiento del 48 por ciento de los autobuses por la mañana, y en el 40 por ciento por la tarde.
Finalmente, el portavoz en este caso de la empresa Obrabus de transporte urbano de Talavera de la Reina, Javier Juárez, afirmó que "estamos abiertos al diálogo, por lo que esperamos que la patronal nos llame pronto para llegar a un acuerdo".
Como muestra de ello, Juan García resaltó la necesidad de que "todas las autoridades y administraciones tengan claro que nosotros no tenemos la culpa de esta situación, sino que es la patronal quien tiene prácticamente congelado nuestro sueldo porque desde hace unos tres años, solo nos suben un punto o dos el salario en los convenios colectivos. Necesitamos equipararnos con otras comunidades autónomas", expresó.
El problema, argumentó por su parte Sereño, "es que antes sacábamos más dinero haciendo horas extra, pero con la reducción de jornada que exige descansos de 12 horas entre medias, porque estamos hablando de que somos responsables de vidas humanas, ya no podemos y eso ha repercutido en nuestro salario".
Por último, Ángel García de SAMAR indicó que "la patronal tiene diez días hasta que comience la huelga para reflexionar y mover ficha. De su mano está desconvocar esta huelga que es una sin razón", concluyó.