CIUDAD REAL, 24 Sep. (EUROPA PRESS) -
El juicio que hoy estaba previsto celebrar en la Audiencia Provincial de Ciudad Real contra tres personas por los delitos de receptación y falsedad en la compra de 800 monitores de ordenador en 1999 ha quedado aplazado hasta el próximo día 4 de noviembre, al no tener abogado uno de los imputados.
Según señalaron fuentes judiciales, a esta persona se le asignó un letrado del Turno de Oficio, que lo ha abandonado recientemente y se le tendrá que asignar otro abogado en los próximos días.
En este juicio, el fiscal pide dos años y medio para la persona que recibió los monitores y los almacenó en su empresa en Ciudad Real --los aparatos están inmovilizados desde 2000 por orden judicial-- y que, supuestamente, emitió una factura falsa a nombre de una persona que no tenía nada que ver con el caso.
Por su parte, la acusación particular pide entre cuatro y seis años de prisión para esta persona y otras dos más, entre ellas, un ciudadano de origen español que trabajaba en Holanda en la empresa que vendía los monitores.
Según la acusación, esta persona, mientras su jefe se encontraba de vacaciones, ordenó la venta de los aparatos que, en aquel momento, tenían un valor que superaba los 91.000 dólares. Ese pedido fue enviado, en primer lugar a Madrid, aunque posteriormente, se dijo que se mandará a una empresa de Ciudad Real.
Este hombre, que estuvo hoy presente en la Audiencia Provincial, fue declarado en busca y captura, aunque su abogado defensor mantuvo hoy ante los medios que siempre ha estado localizado.
Este letrado, por otro lado, señaló que este caso ya sido visto en Holanda, donde fue sobreseído, y en Madrid, donde se consideró que no había delito, aunque la empresa que vendió los monitores también presentó una tercera demanda en Ciudad Real, al ser esta la provincia donde llegaron finalmente.