VALLADOLID 28 Jun. (EUROPA PRESS) -

Al menos uno de cada diez niños sufre el robo de su clave de e-mail o messenger, según un estudio realizado por la consultora Tolten GDP para el proyecto 'Dédalo' llevado a cabo por la Federación de Empresas de Tecnologías de la Información, Comunicaciones y Electrónica de Castilla y León (Aetical) para tratar de sensibilizar a los alumnos, padres y profesores sobre la importancia del uso "responsable" y "seguro" de la red.

Del estudio, realizado entre 2.000 alumnos de sexto curso de Primaria (11-12 años), se deduce que el 10,86 por ciento de los menores entrevistados manifiestan que les robaron su clave de acceso al messenger o al correo electrónico. Además, a este porcentaje habría que añadir el de aquellos que no son conscientes de que su contraseña fue sustraída por otra persona.

Según consta en un comunicado de Aetical recogido por Europa Press, estos robos se pueden realizar de una manera "bastante sencilla" y suele usarse para ello algún tipo de software malicioso como virus, 'spyware', troyanos o gusanos.

Asimismo, según las mismas fuentes, este hecho supone el inicio de una situación "peligrosa" ya que cuando a una persona le roban su clave de acceso, "lo cual es algo ilegal de por sí", advirtió Aetical, su información privada puede ser vista como conversaciones, relación de contactos, información sensible y además quien la usurpó puede usarla y hacerse pasar por ella, con lo que el abanico de problemas se amplía.

Según manifestó Jorge Flores, experto de 'PantallasAmigas' consultado para la confección del estudio el robo de estas claves es una cuestión de "máxima importancia" puesto que es una "estrategia muy común" utilizada tanto en los casos de 'grooming' como en los de 'ciberbullying'.

"El acosador accede a datos privados del messenger y cuenta con la lista completa de contactos de la víctima con lo que puede iniciar un chantaje que derive en graves daños", añadió Flores.

En este sentido, el Programa Déd@lo impartió jornadas formativas para alumnos de sexto de primaria, sus padres y profesores, donde se dieron algunas recomendaciones básicas como proteger la seguridad del equipo porque con ella aumenta la de quien lo utiliza; proteger las claves de manera que no se compartan ni se cambien de forma periódica y no almacenar información o imágenes demasiado comprometidas en determinados servicios online creyendo que las opciones de privacidad restringen el acceso a las personas que uno decide de forma voluntaria.

Por último, según los datos del estudio realizado sobre 2.000 alumnos, más del 95 por ciento aseguró usar el messenger, de los que el 15 por ciento manifestó usarlo a diario y el 40 por ciento varias veces por semana. Por su parte, los padres de éstos afirmaron conocer que sus hijos usan esta herramienta aunque únicamente el 44 por ciento sabe cuál es la clave de acceso de sus hijos.