El 66% de los empresarios leoneses considera que la actual división territorial perjudica los intereses de la provincia

Actualizado: miércoles, 12 enero 2011 15:26

LEÓN, 12 Ene. (EUROPA PRESS) -

El 66 por ciento de los empresarios leoneses opina que la actual división territorial perjudica los intereses de la provincia, frente al siete por ciento que piensa que es beneficiosa y un 27 por ciento que considera que este hecho no interfiere en los resultados empresariales, según la Encuesta Confianza Empresarial ante 2011 realizada por el Círculo Empresarial Leonés (CEL).

Estas valoraciones empeoran respecto de las obtenidas en el sondeo realizado el pasado año, que confirmaban una cierta tendencia iniciada en 2009 a favor de la actual división territorial de la Comunidad. Por el contrario, la encuesta de 2011 arroja nuevamente dudas sobre la organización administrativa de la autonomía, ya que se incrementan en casi diez puntos las respuestas que afirman que León sale perjudicada en el reparto territorial.

En el análisis sectorial, se manifiesta que la división administrativa perjudica a la provincia en una horquilla entre el 65 por ciento de los sectores de comercio y servicios; el 67 por ciento de industria y el 76 por ciento de construcción, el sector más crítico en esta cuestión.

Por el contrario, las actividades de comercio son las que más indican los efectos positivos de la actual división territorial, con un 13 por ciento de respuestas que así lo señalan, un porcentaje que, según el CEL, queda lejos de ser lo suficientemente representativo.

De esta manera, se agudiza este año la tendencia del empresariado leonés a pensar que existen pocas ventajas para la provincia de León por el hecho de pertenecer a la comunidad de Castilla y León y se rompe la "tímida consciencia" detectada en los dos años anteriores de que los resultados empresariales y la evolución económica dependen más del trabajo, las estrategias acertadas y la correcta gestión que del entramado político-territorial.

Así, el CEL apuntó que persiste entre el tejido empresarial leonés la sensación de un exceso de centralismo y de protagonismo económico de unas provincias sobre otras, lo que repercute finalmente en el desarrollo y resultados de las compañías.