Califican ambas muertes de "ejecución" y coinciden en que el móvil fue una deuda pendiente por drogas
VALLADOLID, 19 Dic. (EUROPA PRESS) -
El fiscal y las dos acusaciones particulares personadas en el juicio con jurado por el doble crimen registrado el 5 de octubre de 2014 en el Club 'Las Vegas' de Medina del Campo (Valladolid), donde encontraron la muerte el propietario y una camarera, han decidido mantener sus peticiones de pena para los tres principales inculpados, Manuel M.M. ('Gitano'), su esposa María Vicenta P.P. y Antonio Adrián B.R. ('Malaguita), expuestos cada uno de ellos a un total de 42 años de cárcel.
La última sesión del juicio que se sigue desde el pasado día 12 de diciembre en la Audiencia de Valladolid ha estado centrada en la presentación de los informes definitivos de las partes, con la única salvedad de que los tres acusadores, debido a la imposibilidad de determinar la autoría material de los disparos, han modificado el relato de hechos para dejar constancia de que bien Manuel o Antonio Adrián--antes señalaban todos ellos al primero--sacó el arma dentro del club y la utilizó "vilmente" contra las dos víctimas y sin posibilidad alguna de que éstas se defendieran, como así ha añadido la acusación pública.
"Querían cobrar la deuda, compraron el revólver y asumieron las consecuencias del uso del arma", ha resumido el fiscal, en referencia al viaje que Manuel M.M. y su entonces novia efectuaron presuntamente a Madrid para recoger allí a Antonio Adrián--ayudaba al anterior a cobrar deudas por asuntos de drogas--y, tras hacer escala en Fuenlabrada para comprar la pistola, desplazarse acto seguido los tres hasta Medina del Campo donde los dos varones entraron en el club para saldar cuentas mientras la mujer aguardaba dentro del turismo.
El móvil parece claro. El titular de 'La Vegas' había comprado 50 gramos de cocaína a Manuel M.M. y tan sólo había pagado la mitad del importe.
La forma en la que murieron el dueño del burdel, Mariano Esteban G, y la camarera de origen rumano Laura M.A, el primero alcanzado por la espalda y luego rematado ya en el suelo en la cabeza y la segunda disparada en un hombro y segundos después en plena frente, ha sido considerada por los acusadores como una "ejecución" de la que milagrosamente escaparon otras tres trabajadoras al lograr huir del local por la puerta trasera.
"No acusamos no obstante por tres tentativas de asesinato", ha advertido el fiscal a los cinco varones y cuatro mujeres que integran en jurado popular, a quienes sí ha recordado que precisamente el testimonio de las tres aludidas ha sido "fundamental" para el esclarecimiento de los hechos, ya que facilitaron inicialmente la descripción física de los dos autores, que coinciden plenamente con las del 'Gitano' y el 'Malaguita', y llegaron a reconocerles a posteriori en rueda de reconocimiento.
ALTERNATIVA COMO "CÓMPLICE"
En el caso de María Vicenta P.P, los tres acusadores plantean como alternativa la posibilidad de que ésta sea considerada "cómplice" de los dos anteriores en el doble asesinato, con lo que la condena para ella podría reducirse a once años y dos meses por cada una de las muertes, mientras que para el cuarto procesado, Pablo A.L, a quien inicialmente pedían dos años por delito de encubrimiento, ya que ayudó a los anteriores a deshacerse del revólver, han rebajado su petición de pena a seis meses de privación de libertad.
En concepto de responsabilidad civil, el fiscal solicita que los tres primeros acusados indemnicen a cada una de las tres hijas del hostelero fallecido con 75.000 euros y con otros 50.000 a su viuda, así como con otros 75.000 a cada uno de los dos hijos de la camarera rumana que encontró la muerte dentro del club.
Por su parte, el letrado del hostelero reclama 90.000 euros de indemnización para cada uno de sus tres hijos y su esposa, así como otros 50.000 por daños y perjuicios, mientras que la representación legal de la camarera interesa 70.000 euros para la madre y 90.000 para cada uno de los dos hijos menores de la fallecida.
En el lado opuesto, las defensas de los tres principales inculpados han mantenido su petición absolutoria, en la línea de lo expuesto por sus patrocinados, pues Manuel alega que no estuvo dentro del club y culpa directamente a Antonio Adrián del doble asesinato y éste sostiene que ambos entraron en el club para cobrar la deuda pero que fue el primero el que apretó el gatillo, sin que él estuviera al corriente de las intenciones homicidas de su compañero de banquillo.
El defensor de María Vicenta, por su parte, también pide un fallo absolutorio por entender que la acusada ni fue a Madrid a recoger a 'Malaguita' ni aguardó dentro del coche, a las puertas del club, mientras los dos anteriores tiraban de gatillo, y mucho menos que conociera el propósito de ambos, mientras que el letrado del acusado de encubrimiento ha interesado una pena mínima en aplicación de las atenuantes de confesión y colaboración con la Justicia.
Las previsiones iniciales apuntan que los integrantes del jurado popular contarán este lunes con el objeto del veredicto cuyas preguntas deberán responder y que determinará la suerte de los cuatro procesados.
