El acusado de intentar matar a su mujer a través de un sicario asegura ser inocente y víctima de un chantaje

Actualizado: lunes, 16 noviembre 2015 18:51

LEÓN, 16 Nov. (EUROPA PRESS) -

La Audiencia Provincial de León juzga desde este lunes a un vecino de Villadangos del Páramo (León), acusado de contratar a un sicario para matar a su mujer. No obstante, en su declaración, el procesado ha asegurado que es "inocente" y ha afirmado que "nunca pensó en matar a su mujer" porque su relación con ella era "excelente" y ha explicado que su acusación es fruto de un chantaje.

El Ministerio Fiscal, en sus conclusiones preliminares, cree que este hombre es autor de un delito de asesinato en grado de tentativa con el agravante de parentesco y solicita una pena de 13 años de prisión.

Los hechos se remontan a julio de 2014, según las conclusiones provisionales, cuando el acusado decide acabar con la vida de su esposa para poder continuar con una relación extramatrimonial que mantenía desde hace años. Para ello, contacta con un sicario, testigo protegido en la causa, para que mate a su mujer a cambio de 20.000 euros, de los que paga 3.000 en modo de anticipo.

El hombre encargado de actuar como sicario ingresó en prisión, por lo que un segundo sicario, también testigo protegido en este caso, se hace cargo del asesinato. El día del crimen se fijó para el día 14 de agosto, pero finalmente no se llevó a cabo porque los encargados de cometer el asesinato acudieron a la Policía. El 16 de agosto el procesado fue detenido con 10.000 euros en efectivo escondidos debajo de un asiento del coche que conducía.

En su declaración, el acusado ha justificado que hizo un pago de 3.000 euros a uno de los supuestos sicarios, a quien dijo conocer de "ir a jugar al billar y al dominó", pero no en concepto de anticipo para que matara a su esposa, sino como consecuencia de un chantaje. Ha explicado que ésta persona le extorsionaba bajo la amenaza de contarle a su mujer que estaba manteniendo una relación con otra persona.

NUMEROSAS INFIDELIDADES

Además, ha insistido en que en ningún momento pretendió matar a su esposa porque con ella mantenía "una relación excelente", pese a las numerosas infidelidades que ha confesado. También ha precisado que, él mismo, si hubiera querido, hubiera podido matarla ya que había tenido oportunidad de hacerlo.

La versión del Ministerio Fiscal ha sido ratificada por varios policías, que se encargaron de la detención del procesado. Una de las agentes ha precisado que en el momento de la detención, el acusado escondía bajo el asiento de su vehículo 10.000, que él ha justificado de la venta de una cosechadora, con la que trabajaba.

Durante la jornada del martes continúa la vista. Están citados a declarar siete testigos y está previsto que se lean las conclusiones finales.