VALLADOLID, 4 May. (EUROPA PRESS) -
Uno de cada cinco vinos con denominación de origen que se comercializan en el canal de la hostelería en España pertenecen a bodegas de Castilla y León a pesar de la tendencia descendente general en el consumo de esta bebida en el conjunto del país, según indicó hoy el manager de Clientes y Servicios de la consultora Nielsen, Ángel García, durante la presentación del informe sobre la evolución del mercado de los caldos de la Comunidad en 2009.
La memoria revela que las ventas de vino en España tanto en el canal de la alimentación como en el de hostelería se redujeron en 2009 un 1,9 por ciento en volumen y un 2,4 por ciento en valor, un comportamiento que contrasta con el de esta bebida en la Región, donde en los últimos años se mantienen en alza.
Así, los caldos castellanoleoneses con denominación alcanzaron en 2009 el 17,1 por ciento de cuota de mercado --un 1,6 por ciento más que el año anterior--, lo que convierte a la Comunidad en la que mayor progresión tiene en los últimos años, con una ganancia de 2,5 puntos. En cuanto a volumen de ventas, las cinco denominaciones que participaron en el estudio --Ribera del Duero, Rueda, Toro, Cigales y Bierzo-- experimentaron un aumento del 1,6 por ciento.
El ascenso de la participación en el mercado se dejó notar especialmente en la hostelería, donde uno de cada cinco (el 19,8 por ciento) vinos vendidos procedía de Castilla y León, mientras que en el canal de la alimentación éstos consiguieron llegar al 14,3 por ciento e incrementar la ventas en un 10,3 por ciento.
Los resultados, según apuntó durante la presentación del estudio la consejera de Agricultura, Silvia Clemente, atiende a parámetros "no casuales" y que son "fruto del esfuerzo prolongado en el tiempo" en la Comunidad, donde hace diez años se puso en marcha, con fondos europeos, una política de reestructuración del viñedo basada en el traslado de las cepas de zonas marginales a áreas con denominación de origen y que permitió dar valor a 13.000 nuevas hectáreas.
Según el origen, el mejor comportamiento lo experimentaron los caldos de Rueda en términos relativos --un aumento en consonancia con el crecimiento de los vinos blancos de los últimos años--, mientras que los de la Ribera del Duero obtuvieron los mejores resultados en términos absolutos.
CAMBIO DE TENDENCIA EN OCIO
Ángel García recordó que desde 2002 el vino en el canal hostelería "ha perdido terreno en favor del de la alimentación" y, al hilo de ello, incidió en que el peso del vino en este último apartado alcanza ya el 60 por ciento.
El manager de Nielsen achacó este ascenso a la contención del gasto en ocio fuera del hogar generado por la crisis y al cambio de tendencias que ella conlleva, que favorece el que las familias decidan no salir a cenar a un restaurante para hacerlo en casa. En este sentido, insistió en que las ventas de caldos con denominación en la alimentación crecieron en el último año un 10,3 por ciento.
"Aunque hace unos años significaba muy poco para ellos, es el canal que ha permitido más desarrollo de los vinos de la Comunidad", aseveró, a la vez que reconoció que "la calidad como bandera", "el valor de la marca", el amplio surtido que se ofrece al consumidor y el esfuerzo hecho en la distribución para que lleguen a todos los mercados han contribuido a comercializar más productos en dicho canal.
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