VALLADOLID, 12 Jul. (EUROPA PRESS) -
CCOO ha denunciado a una treintena de empresas subcontratadas por la Junta ante Inspección de Trabajo y Seguridad Social por el estrés térmico que sufren los bomberos forestales y su exposición a agentes "químicos y cancerígenos" derivados de un modelo de operativo "del siglo XIX".
Así lo ha avanzado el secretario de Organización de la Federación de Industria de CCOO, Juan Manuel Ramos, y el secretario de Acción Sindical, Óscar Ferrero, que han criticado el plan de incendios del Ejecutivo autonómico, "un dos por uno". "Los trabajadores tenemos que apagar incendios y a la vez hacer tratamientos selvícolas, algo que debería hacerse en invierno", ha resumido Juan Manuel Ramos.
Una situación, ha expuesto Ferrero, a la que se enfrentan los 4.500 retenes de prevención operativos en la actualidad; 516 personas en helitransportadas y más de 1.400 en cuadrillas de tratamiento selvícolas.
Ramos ha reivindicado un "cambio de modelo más profesional" y dejar de hacer estas tareas "a más de 30 grados y con trajes pesados" en época estival. "Los trabajos de poda, desbroce... suponen un importante desgaste físico con unos trajes que impiden la sudoración y la refrigeración del cuerpo lo que supone importantes situaciones de estrés térmico para el bombero forestal", ha añadido.
Al hilo de estas palabras, el representante de CCOO ha argumentado que si los fuegos se apagasen en "invierno" estas tareas no se realizarían y ese tiempo se podría dedicar a "formación" para tener un cuerpo "de élite" en Castilla y León. "Vamos a ver si con estas denuncias somos capaces de cambiar el modelo y la Inspección de Trabajo sitúa a la Junta en su sitio", ha apostillado.
La denuncia, además, se ha hecho extensiva a que los trajes que utilizan durante sus trabajos están expuestos a agentes químicos, contaminantes e incluso cancerígenos. "Humo, hollín y benceno se impregnan en los equipos y su lavado tendría que correr por cuenta de la Junta porque introducimos estas sustancias en nuestros hogares afectando a las familias", ha agregado para ahondar que la Agencia Internacional de Investigación del Cáncer considera la exposición ocupacional de la extinción de incendios como cancerígeno para los humanos.
AVITUALLAMIENTOS
Ramos ha aprovechado la rueda de prensa para rogar "amabilidad" a la Junta con sus bomberos forestales y procurarles un avituallamiento "correcto" cuando están trabajando en la extinción de incendios. Una denuncia realizada después de que le hayan llegado más de una decena de quejas de trabajadores en el operativo de Salamanca.
"Esta situación no debe volver a repetirse. Es una falta de consideración hacia las personas del sector que se está dejando la vida. Han recibido un avituallamiento pésimo y en muchas ocasiones mucho tiempo después de haber comenzado a trabajar", ha lamentado.
En este punto ha lanzado una reflexión. "Apagar un gran incendio cuesta 50.000 euros la hora. Apagar el de la Sierra de la Culebra ha supuesto superar cinco veces el presupuesto de la Junta en cuanto a prevención. Igual es mejor prevenir fuegos en invierno y dotar de más presupuesto para profesionalizar a los trabajadores, hacerles fijo durante todo el año y fijar así población en el medio rural. Si el incendio en La Culebra ha servido para hacer reflexionar a la clase política, toda la perdida ecológica tendría una deriva positiva. Si aun así no lo hacen, desde CCOO seguiremos peleando por unas condiciones dignas", ha concluido.
