ZAMORA, 18 May. (EUROPA PRESS) -
El sindicato agrario COAG de Zamora pidió hoy a la Junta de Castilla y León que no sea tan "rigurosa" a la hora de obligar a los agricultores a arrancar viñedo de plantaciones efectuadas a partir del 1 de septiembre de 1998 sin derechos de replantación.
El problema, explicó la organización, surge porque la Administración Regional entiende que todos los viñedos plantados a partir de esa fecha en los que no le conste la existencia de derechos de replantación, son irregulares, sin pararse a analizar si la plantación de dichos viñedos se ampara en arranques anteriores a 1997, fecha en la que no era necesaria la comunicación de arranque, o bien, la nueva plantación es la replantación por sustitución de viñedo viejo en la misma explotación, incluso en la misma parcela.
El hecho de que el agricultor no haya comunicado que esas superficies se replantaron en alguno de los años posteriores, "no debe derivar en ningún momento con la sanción de arranque del viñedo sino, y en el peor de los casos, tipificarlo como infracción leve sujeta a una reducida multa".
COAG Zamora solicitó a la Dirección General de Producción Agropecuaria, y al propio Consejero de Agricultura, "la necesaria flexibilidad con todos aquellos expedientes de arranques obligatorios que sean consecuencia directa de errores o falta de alguna tramitación o comunicación burocrática o administrativa, ya que estas plantaciones no han supuesto ni incremento de superficie vitícola, ni de la capacidad productiva".
