BURGOS, 9 Abr. (EUROPA PRESS) -
La Guardia Civil de Tráfico de la Comandancia de Burgos ha desarticulado una organización dedicada a la falsificación de permisos de conducir cuyo destino era la obtención de tarjetas de tacógrafos que habilitaran a sus poseedores para conducir camiones, según informaron a Europa Press fuentes de la Benemérita.
Con esa operación, la Guardia Civil da por concluida una primera fase de las investigaciones que se ha saldado con trece personas detenidas por falsedad documental y otra más imputada, junto con el esclarecimiento de siete delitos contra la seguridad vial y otro más de usurpación de identidad.
Además, se han tramitado cinco expedientes por infracción a la Ley de Extranjería, se han intervenido nueve permisos de conducción falsificados, dos pasaportes y ocho tarjetas de tacógrafos que habilitan la conducción de vehículos pesados, habiéndose inspeccionado más de 250 expedientes.
Las investigaciones comenzaron en octubre de 2009, a raíz de que el Grupo de Informes y Apoyo a Tráfico (G.I.A.T.) del Subsector de Tráfico de la Comandancia de Burgos detectara un caso de falsedad en un permiso de conducción. Este hecho levantó la sospecha entre los agentes, ya que podría tratarse de una trama, en la que tras la obtención de manera ilícita de un permiso de conducción, se obtenían otros beneficios económicos.
La práctica de gestiones descubrió que la finalidad, entre otras cosas, de estos permisos de conducción ilegales era obtener tarjetas de tacógrafos 'legales', que les habilitara para conducir camiones.
El resultado final, tras cotejar información de los expedientes abiertos en España con la de los países de origen y estudiar las rutas de transporte que habitualmente seguían en la Península, ha sido la detención de los 13 conductores.
'MODUS OPERANDI'
Obtenido un permiso de conducción falso, normalmente europeo, tramitaban, previa presentación de este carné y la documentación necesaria, la solicitud de la Tarjeta de Tacógrafo en las oficinas de la administración correspondiente. Conseguida la tarjeta, una vez inserta en el tacógrafo del camión, se podía conducir libremente por todo el territorio nacional y europeo, cubriendo las rutas tradicionales de transporte por carretera.
Además obtenían otras ventajas como la ciudadanía europea, para aquellas personas que no lo eran, abriéndoseles un abanico mayor de posibilidades de trabajo.
También se han detectado 'falsos positivos', ya que tras la obtención de un permiso de conducir falso lo convertían en auténticos en sus países de origen, al renovar datos o modificar su contenido, ya que en esas oficinas se otorgaba un nuevo número de carné, ya verdadero.
Una vez conseguida, de esta forma, la expedición legal de un permiso de conducción, podían acceder a otros documentos (pasaportes, permisos de conducción de otros de países, cartas y documentos nacionales de identidad).
Además de la instrucción de las diligencias, en las que ha colaborado el G.I.A.T. de Soria, se ha entregado, por cada detención, un informe pericial complementario en los juzgados de guardia correspondientes.
