SORIA, 31 Mar. (EUROPA PRESS) -
La plataforma soriana 'No a la cárcel' criticó hoy de nuevo el "engaño" y "manipulación" por parte del Gobierno que preside José Luis Rodríguez Zapatero después de que el Consejo de Ministros aprobara el pasado viernes la expropiación forzosa de los terrenos necesarios para construir el futuro centro penitenciario, en el paraje de 'La Laguna', a escasos kilómetros de la capital.
Esta aprobación supone que la expropiación por parte de la Administración de 197.000 metros cuadrados de los 250.000 que ocupará la nueva prisión, ya que la Sociedad Estatal de Infraestructuras Penitenciarias (SEIP) sólo ha alcanzado un acuerdo con los propietarios de 52.000 metros cuadrados.
En un comunicado recogido por Europa Press, la plataforma criticó "el engaño" del Ejecutivo que "intoxica a la opinión pública", ya que el emplazamiento de este proyecto ha sido elegido por el Ministerio del Interior de forma unilateral, sin contar con la opinión de los sorianos, lo que convierte a esta decisión en "una situación única en España".
Este colectivo aseguró que su acusación de engaño hacia el Gobierno procede del desconocimiento sobre el tamaño y la capacidad de la futura cárcel, ya que no se ha informado a los ciudadanos de estos puntos, ni tampoco, recordó el documento, de los lugares en los que se construirán los accesos al centro penitenciario ni por dónde se llevarán los servicios.
Por ello, los portavoces de la plataforma se reunirán en los próximos días con los grupos políticos presentes en el Ayuntamiento de Soria para solicitar, una vez más, un encuentro con el alcalde de la capital, Carlos Martínez, con el objetivo de que haga cumplir el acuerdo alcanzado en el pleno municipal y que pasa por exigir a la SIEP que informe de forma concreta de las características del proyecto.
Además, los miembros de este movimiento instaron a las formaciones políticas contrarias a esta iniciativa a que "actúen" de forma "inmediata" para paralizar el desarrollo del proyecto.
'No a la cárcel' expresó de nuevo su rotundo rechazo a la prisión por considerarla "una atrocidad" y aseguraron que "nadie la quiere" salvo el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba.
