VALLADOLID 21 Jul. (EUROPA PRESS) -
Las previsiones sobre riesgo de incendios realizadas por el Laboratorio de Teledetección (LATUV), dependiente de la Universidad de Valladolid y único centro de Europa que recibe imágenes de los satélites que observan la Tierra en tiempo real, son "bastante malas", especialmente en la zona suroeste del país, debido a la escasa humedad del suelo.
Así lo explicó en declaraciones a Europa Press el director de este Centro, José Luis Casanova, quien matizó que "en principio" la situación es mala debido a la sequedad del suelo, a la escasa reserva de humedad, lo que hace que la hierba menuda y el pasto estén muy secos.
"Eso actúa como yesca de tal manera que, por desgracia, este año las previsiones de riesgo son, en este momento, bastante malas", explicó el responsable del centro, quien no obstante añadió que en los incendios intervienen "muchas otras circunstancias" como la mano del hombre o las condiciones climatológicas del momento.
La previsión de que este año pueda ser, en materia de incendios, uno de los peores, se sustenta en los datos directamente obtenidos del Instituto Nacional de Meteorología, y en concreto, del balance hídrico, que muestra que los límites de contenido de humedad del suelo está en estos momentos entre el 5 y el 10 por ciento, es decir, "extremadamente bajos".
Según las imágenes que ofrecen los satélites, en la actualidad existen dos zonas "muy extensas" que están "más afectadas" que el resto: el cuadrante sur occidental, es decir, Extremadura, Andalucía Occidental y parte de Castilla-La Mancha, área que está "francamente seca", y el interior de Aragón así como la zona limítrofe con Guadalajara.
Asimismo, la zona de Levante está "mal" pero según las imágenes con las que trabaja este laboratorio pionero, el interior de Tarragona presenta el índice de riesgo más elevado seguido por la Costa Brava y alguna zona de Castellón.
NUEVAS INICIATIVAS.
En este sentido, Casanova calificó de "buena iniciativa" la apuesta del Ministerio de Medio Ambiente, en concreto de la Secretaría general del Territorio y la Biodiversidad, que ha establecido convenios con las universidades de Castilla-La Mancha, Alcalá de Henares y Valladolid.
De este modo y cada una en su campo --Valladolid se encarga de analizar el riesgo, es decir, la etapa previa al fuego--, se están realizando trabajos orientados a ser operativos "pero también con una parte de investigación", lo que a su juicio se demuestra con el hecho de que el propio Ministerio haya puesto parte de su personal técnico para servir de enlace entre los investigadores.
"Creo que estas iniciativas están dando resultados muy interesantes", señaló José Luis Casanova.
CONDICIONES METEOROLOGICAS.
Las condiciones meteorológicas propias del verano como el calor y el viento intenso no ayudan, según apuntó Casanova, a que no haya incendios por lo que si el de 2006 es un año "normal", con la situación actual de la vegetación, el riesgo de incendios va a ser "muy alto".
En referencia a las precipitaciones típicas del verano, el experto apuntó que las lluvias torrenciales no suelen solucionar los problemas de sequedad de la tierra ya que, al ir seguidas de calor intenso, se evapora rápidamente y no son "nada positivas", por lo que en estos casos se precisa de "lluvia tranquila", con nubes "de tipo estratiforme" y otro tipo de lluvia.
El Laboratorio de Teledetección recibe y almacena imágenes desde hace 19 años, lo que permite analizar la evolución en este periodo para comprobar que, "desgraciadamente", el aspecto de la Península Ibérica "cada vez es peor" pese a que haya habido años "extremadamente malos" y otros "buenos".
"La evolución va a peor si se observa un periodo de 19 años, que no es climatológicamente representativo, pero ya empiezan a ser unos cuantos años", manifestó Casanova, quien subrayó que no existe "comparación" entre los medios que existen en la actualidad y con los que se trabajaba en aquel momento.
Así, Casanova recordó que desde hace 19 años, cuando comenzaron los problemas con el fuego y el estudio mediante satélite, se ha registrado una "evolución tremenda" ya que en la actualidad hay medios, experiencia, dispositivos y tecnología.
"En este momento españa, quizá por necesidad desgraciadamente, es uno de los países que más sabe de la lucha contra el fuego", concluyó el experto.