OLMEDO (VALLADOLID), 4 Dic. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Sociedad Cooperativa General Agropecuaria Acor, Carlos Rico, ha abogado este viernes por instalar paneles fotovoltaicos y aerogeneradores como fuente de energía en las instalaciones de riego de las explotaciones de los socios de la cooperativa vallisoletana desde el convencimiento personal de que el futuro está en el ahorro de energía.
Este es uno de los principales mensajes que ha lanzado el presidente de Acor en la Asamblea General Ordinaria de Delegados celebrada este viernes en la planta de Olmedo (Valladolid) en la que se ha ratificado el acuerdo unánime conseguido en las diez asambleas preparatorias para explorar esas alternativas de riego a través de las energías renovables conscientes de la necesidad de rebajar los costes energéticos para hacer más competitivas las explotaciones de regadío.
A pesar de no compartir el "impuesto al sol" que ha planteado el Gobierno de la nación, Rico ha abogado por aprovechar hasta 2020 para fomentar ese "mix" solarfotovoltaico y de aerogeneración para dar estabilidad a unas explotaciones que tienen garantizada además la rotación de cultivos, según ha destacado.
"Hay que empezar a trabajar ya porque el tiempo va que vuela", ha recomendado Carlos Rico, quien ha insistido ante los delegados presentes en la Asamblea General que se trata de una "opción a estudiar muy interesante" que podría contar, incluso, con un "pequeño" apoyo por parte de la cooperativa siempre que "no condicione" a la empresa, ha aclarado.
"Cuando tengamos esto no se ríe de nosotros ni el 'tato'", ha bromeado Rico, quien ve "justificada" la inversión para la instalación de paneles fotovoltaicos y aerogeneradores en explotaciones de entre 15 y 20 hectáreas --en el caso de pertenecer a comunidades de regantes ha propuesto la inversión a ese colectivo-- si bien ha precisado que todo depende del tipo de explotación por lo que ha recomendado realizar antes "análisis muy particulares" para ajustar todos los números de cada explotación con la rotación.
En esa "obsesión" que ha admitido por conseguir rebajar los costes energéticos, Rico ha conseguido la aprobación de la Asamblea para seguir ajustando también los costes fijos de la Azucarera de Olmedo para lo que se promoverán "cuantas acciones e inversiones sean necesarias" para conseguir una capacidad mínima de 180.000 toneladas anuales de azúcar.
En este punto, ha apostado por intentar llegar en un futuro y tras la liberalización del mercado en 2017 a campañas de 120 días, "siempre que lo permita la comercialización".
La Asamblea General Ordinaria de Delegados ha dado el visto bueno también a la adhesión de Acor a la cooperativa aragonesa de segundo grado Arento que, según ha garantizado Rico, no supondrá ningún coste económico para la vallisoletana que podrá estar dentro del proyecto de trigos fuerza y aprender a gestionar "un sector muy importante".
AGRICULTORES SOSTENIBLES
También se ha aprobado la incorporación de Acor en el nuevo estándar de agricultura sostenible SAI --Iniciativa para una Agricultura Sostenible-- al que ya pertenecen los principales competidores de la cooperativa vallisoletana y también sus clientes. "O sí o sí tenemos que estar", ha asumido Rico, en un llamamiento por cuidar también la faceta comercial de Acor a lo que ha añadido que todos los socios están catalogados ya como "oro" por el cumplimiento de las restricciones de la PAC.
Finalmente, ha destacado las oportunidades que supone el acuerdo con Sovena para el aprovisionamiento y transformación de semilla oleaginosa y para la comercialización del aceite alimentario a granel con unos precios muy superiores a los de la media del sector ya que el pasado viernes se cerró liquidar el girasol normal a 400 euros por tonelada y a 430 euros el alto oleico, por lo que ha invitado a sus socios a formalizar unos contratos de producción "con garantías de precios mínimos que se mejoran año a año".
"Vamos mejorando la casa poco a poco y se da solidez a los cultivos", ha resumido Carlos Rico tras la presentación de los datos del primer ejercicio con pérdidas para Acor --9,96 millones de euros-- quien ha apelado a la prudencia respecto a las cifras de esta campaña. "Ni nos gustan ni nos agradan pero están justificadas", ha defendido.
"No vamos a ser agoreros y vamos a esperar a que esto mejore, estamos empezando la campaña", ha exclamado el presidente de Acor quien ha planteado "exportar algo" de producción como azúcar industrial o de otra forma allí "donde salga" siempre que se pueda hacer a un "precio razonable" por encima de los 18 euros por tonelada a los que se paga en estos momentos este producto.
Carlos Rico ha admitido que la actual campaña estará marcada también por la "mochila" de los contratos a dos años suscritos en la anterior para dar salida a unos silos que estaban llenos y cuando la remolacha estaba sembrada. "Había que ofrecer a los buenos y grandes clientes lo mismo que en Europa", ha explicado el presidente de Acor, quien en un "aviso a navegantes" ha vuelto a reclamar a las autoridades europeas que piensen cómo defender las producciones ante los cambios de reglas de terceros países.
Finalmente, ha advertido un cambio de tendencia al alza en el precio del azúcar desde el convencimiento también de que Acor tiene que aprender a saber convivir con este tipo de fluctuaciones para "guardar en las despensas" los picos buenos para pasar épocas valle como la actual.
Carlos Rico ha garantizado una vez más los 42 euros por tonelada de remolacha para los socios de Acor hasta 2020 y ha cifrado en unos 6 euros el sobreprecio que tendrá que afrontar la cooperativa esta campaña frente a los 14,11 para la remolacha de cuota que pagó en la anterior.
