Satse denuncia la "falta de previsión" de los servicios sanitarios de Valladolid en la dotación de vacunas infantiles

El sindicato considera que el exceso de burocracia retrasa la vacunación a los niños y repercute en el trabajo de los enfermeros

Europa Press Castilla y León
Actualizado: viernes, 24 febrero 2006 16:10

VALLADOLID, 24 Feb. (EUROPA PRESS) -

El Sindicato de Enfermería Satse en Valladolid denunció hoy la falta de vacunas infantiles en los centros de salud de Valladolid desde el pasado mes de diciembre y exigió una "mayor dotación" debido a que las enviadas son "escasas" en relación al número de niños receptores de las mismas.

El sindicato, en una nota recogida por Europa Press, consideró que la situación "está repercutiendo en el trabajo de los enfermeros", que se quejan del "exceso de burocracia" que retrasa la vacunación a los niños y que se ven "presionados" por los usuarios ya que sufren directamente las consecuencias "de esta falta de previsión de los servicios territoriales de Sanidad".

"En muchos casos los padres y los familiares de los niños se ven obligados a marcharse de los centros de salud sin haber podido vacunar a sus hijos y son los profesionales de Enfermería los que se enfrentan a la indignación de los usuarios", señaló la secretaria provincial de Satse en Valladolid, Silvia Sáez.

En su opinión, además de padecer la presión de los padres, los enfermeros de los centros de salud son los que llevan el control y registro de las vacunaciones "y en este caso se ven en la tesitura de tener que llamar todos los días al servicio de vacunas para exigir el envío de las mismas".

Asimismo, los profesionales de Enfermería se "quejaron" de la burocracia exigida por los servicios territoriales de Sanidad para la solicitud de vacunas "ya que cuando se trata de dosis como la de la meningitis tiene que pasar por varios procedimientos administrativos para su petición".

"Por este motivo, y hasta que llega el envío hasta el servicio de vacunas, las enfermeras han tenido que realizar muchas tareas administrativas que suponen una pérdida de tiempo y un retraso respecto al momento en que habría que vacunar al niño", manifestó Sáez.

Contenido patrocinado