VALLADOLID, 20 Feb. (EUROPA PRESS) -
La Universidad de Valladolid (UVA) recopilará y difundirá la música subsahariana a través de la colección 'Cuadernos de África', cuyo primer número presentó hoy, lo que convierte a la institución vallisoletana en la única en el fomento de esta cultura de "difícil salida" en España.
Así lo manifestaron el vicerrector de Relaciones Institucionales, Alfonso Redondo, y la directora gerente de la Fundación Alberto Jiménez Arellano, Ruth López-Diéguez, durante la presentación del primer número de la colección titulado 'Approaches to African Music'. "Este trabajo será el primero de muchos donde se recogerán trabajos de difícil salida en España", afirmó López-Diéguez, que avanzó que en el próximo cuaderno se incluirán los nuevos actos previstos, como la Antología de Música Africana y la exposición de instrumentos subsaharianos, que se abrirá el 9 de marzo.
Redondo explicó que la Universidad de Valladolid tiene "un valor añadido" a través de las conferencias impartidas en los ciclos de estío de 2005 y de la exposición, "que aterrizó en Valladolid por casualidad", por lo que se decidió su fomento y divulgación.
En la portada del libro aparece una cítara y contiene conferencias de prestigiosos estudiosos de la musicología internacional y africana como el profesor emérito Simha Arom, del Centro Nacional de Investigaciones Científicas de Francia; Ruth Stone, directora del Instituto de Etnomusicología de la Universidad de Indiana o Polo Vallejo, el etnomusicólogo español más importante de música africana.
Se trata de música y cultura vinculada a distintas lenguas que se interpreta en la franja subsahariana, donde conviven al menos una treintena de países, precisó la directora gerente de la Fundación Jiménez Arellano.
Por su parte, el vicerrector destacó la riqueza de sonidos existente en los países y cultura de esta zona de África y subrayó que existe una vinculación de la música con otras expresiones culturales como la literatura.
La directora gerente de la Fundación Jiménez Arellano explicó que las instituciones tienen una posición más de colaboración pero no han entrado en su arte, ni han expuesto ninguna colección al público, como es el caso de la Universidad de Valladolid.
