BARCELONA 10 Ago. (EUROPA PRESS) -
El Institut de Recerca i Tecnologia Agroalimentàries (IRTA) ha realizado un estudio, encargado por el Consell Comarcal del Alt Camp, que constata que si se planta los 'calçots' a finales de agosto se incrementa la producción más de un 10%.
El estudio también muestra que si se planta en estas fechas mejora la calidad de la hortaliza, y que si se planta en septiembre provoca un descenso de más del 50 por ciento en la producción comercial.
Pese a estos resultados, los expertos no recomiendan avanzar más la fecha de plantación, y menos en zonas cálidas, sobre todo las cercanas a la costa, para evitar problemas fitosanitarios.