Asegura que es compatible el riego con la protección de las aves
BARCELONA, 16 Ago. (EUROPA PRESS) -
El conseller de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentación de la Generalitat, Jordi Ciuraneta, quiere replantear la estrategia llevada a cabo en el canal Segarra-Garrigues para tirar adelante la infraestructura con el foco puesto en activar a los agricultores.
En una entrevista de Europa Press, Ciuraneta ha asegurado que para atraer al agricultor es necesario generar confianza, y para ello deben crearse nuevas estrategias: "Si han pasado una serie de años y no está funcionando como preveíamos, seguramente algo tengamos que replantear".
El canal Segarra-Garrigues, de 84,7 kilómetros de recorrido, tiene como objetivo la transformación en regadío de 70.150 hectáreas de la provincia de Lleida.
Hasta el momento, el Govern, con su antecesor en el cargo, Josep Maria Pelegrí, habían impulsado los denominados motores, alianzas con empresas para promocionar el riego con proyectos como el de manzanos con Fruits de Ponent de Alcarràs, la doble cosecha anual para la alimentación ganadera con la Cooperativa de Ivars d'Urgell y la plantación de 50 hectáreas de cultivos de pistacho en la finca Mas de Colom de Tàrrega (Lleida) con Borges Mediterranean Group.
Completan la lista el impulso de la viticultura de regadío en Verdú a través de la unión de Grupo Codorníu, el Consejo Regulador de la Denominación de Origen Costers del Segre y el Grupo de Bodegas de Valls del Riucorb, y el acuerdo anunciado con Alimentaria Guissona para incrementar el potencial cerealístico de la zona.
Sin embargo, Ciuraneta, que no replantea la infraestructura en sí misma sino su uso, quiere captar no solo a grandes empresas, sino también generar interés de pymes y vincular la estrategia del agua con la agroalimentaria.
ZONAS ZEPA
En enero de 2013, Pelegrí anunció que el Govern estaba impulsando pruebas piloto autorizadas por la Unión Europea (UE) y contempladas en la Declaración de Impacto Ambiental (DIA) para estudiar si es posible el riego en las Zonas Zepa y la protección de las aves al mismo tiempo; el área regable del canal Segarra-Garrigues son 70.000 hectáreas, de las que unas 35.000 son Zonas Zepa.
Sobre estas pruebas, Ciuraneta ha asegurado que la Generalitat sigue trabajando en ellas, pero "el resultado es que es compatible", y ha llamado a un debate dentro del sector y de la administración.
"Creo que hay que replantear que haya tantas Zonas Zepa, colaborar más con el mundo científico y académico para aportar a Bruselas que las aves pueden vivir en zonas de riego", ha dicho Ciuraneta.
"Hay que tener muy claro que lo que se está haciendo en la administración catalana no es querer engañar a nadie, sino querer hacer las cosas muy bien hechas", ha añadido el conseller.
