El caudal del río Gran Valira crece hasta los 160 metros cúbicos por segundo
ANDORRA LA VELLA (ANDORRA), 23 Oct. (EUROPA PRESS) -
El temporal que ha afectado Andorra la madrugada de este miércoles ha causado "pequeños" daños según han explicado a Europa Press los responsables del departamento de Protección Civil, del Cuerpo de Bomberos y del área de Conservación y Explotación de Carreteras (Coex).
Lo más destacable, según ha explicado el director del departamento de Protección Civil, Cristian Pons, ha sido el desprendimiento que se ha producido a primera hora de la mañana en la avenida Fiter i Rossell de la parroquia de Escaldes-Engordany, que ha mantenido cortada la vía casi todo el día.
Los técnicos del Coex han estado trabajando hasta primera hora de la tarde para retirar la tierra y el lodo que han caído a la calzada, entre 50 y 60 toneladas, ha calculado el director del Coex, Jordi Garcia, que ha explicado que se ha derrumbado un talud de unos cuatro metros de altura y de entre 15 y 20 metros de longitud.
Más allá de este desprendimiento, el Coex ha repasado toda la red viaria de carreteras y ha hecho intervenciones por alguna roca, ramas caídas y para limpiar los drenajes que estaban saturados por hojas y propiciaban la inundación de algunos tramos de carretera; pero no ha habido "ninguna incidencia grande".
Por su parte, los bomberos han realizado una veintena de salidas relacionadas con la tormenta para actuar en retiradas de árboles en calzadas, algún rótulo y andamio afectado por el viento, pequeñas inundaciones y, en definitiva, actuaciones "no complicadas", ha expresado el oficial de guardia, Jaume Sánchez.
La actuación más relevante, por ser "más espectacular que otra cosa", ha sido por la caída de un rayo en una torre eléctrica en la parroquia de Sant Juli de Lria, que ha hecho saltar chispas y ha obligado a cortar temporalmente una parte del servicio eléctrico.
ACTUACIONES PREVENTIVAS
Las otras actuaciones, como ha explicado el director del departamento de Protección Civil, Cristian Pons, han sido de carácter preventivo y de seguimiento de los caudales de los ríos, de los que estaban muy atentos por la posibilidad de que se desbordaran.
Finalmente, "no se han desbordado en ningún punto del territorio", aunque se habían cerrado los paseos del lado del río tanto en Canillo como en Sant Juli de Lria de forma preventiva.
Pons ha destacado que se han registrado "pequeñas incidencias más relacionadas con el viento que con el agua", por las que los operarios de los distintos comuns --ayuntamientos-- han tenido este miércoles bastante trabajo en retirar ramas y árboles caídos.
135 KILÓMETROS POR HORA
El episodio de temporal ha dejado hasta 135 litros por metro cuadrado y vientos de 135 kilómetros por hora, según ha informado el ministro portavoz, ric Jover, en su comparecencia para explicar los acuerdos tomados por el Consejo de Ministros.
Jover también ha explicado que el caudal del río Gran Valira ha crecido y se calcula en 160 metros cúbicos por segundo, cuando en época de deshielo es de unos 50 metros cúbicos por segundo.
El ministro ha expuesto que se ha reforzado, siguiendo el consejo de los expertos, el dispositivo de vigilancia de la zona de la Portalada, donde en agosto se produjo un desprendimiento que obligó a cerrar la carretera al tráfico y que causó importantes daños en un centro comercial de enfrente.
Las intensas lluvias han producido un movimiento más acelerado del talud, según ha explicado Jover, aunque "no hay ningún riesgo inmediato asociado"; de todos modos, el dispositivo de vigilancia se mantendrá mientras así lo aconsejen los técnicos.
